Salud en Chiloé: al menos 28% de todos los muertos en 2023 estaban en listas de espera

ISLA DE CHILOÉ (La Opinión de Chiloé) — Un alarmante informe sobre los magros niveles de resolutividad en las listas de espera del Servicio de Salud Chiloé, y que la posiciona entre los de peores resultados a nivel nacional, es el que sigilosamente se ha venido ocultando durante las últimas semanas en la Provincia atendido a que revelaría un significativo aumento de la proporción de muertos que estaban con diversas patologías esperando atención, algunos de los cuales llevaban años.

De acuerdo al reporte que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé que se liberó en algunas comisiones del Congreso Nacional, junto con entregar el total de fallecidos en alguna de las listas de espera para el año 2022, también se realizó un catastro de todos aquellos «egresos» de estas listas producto de defunción durante 2023, vale decir, estando a la espera de recibir una hora para interconsulta a especialista, cirugía o que, siendo paciente AUGE-GES, esperaban recibir atención en virtud de las obligaciones que impone la ley.

Así las cosas, y respecto a quienes no alcanzaron a recibir atención en el sistema de salud en 2023, las cifras corresponden a aquellas solicitudes registradas en el Sistema de Gestión en Tiempos de Espera (SIGTE) al 31 de diciembre de 2023, y aunque no se entrega desglosada por ahora, si es un fuerte indicador del deterioro en la gestión que viene arrastrando el Servicio de Salud Chiloé.

En consecuencia, y de manera provisional, se puede indicar que tras la revisión de los registros de pacientes en la red pública de salud, se pudo concluir que entre enero y diciembre de 2023, un total de 385 «egresos» de las listas de espera fueron por fallecimiento, vale decir, residentes en el Archipiélago de Chiloé que tenían alguna interconsulta en el sistema ya sea para ser atendido por especialista, recibir una cirugía o para acceder a las garantías del programa AUGE-GES.

Esta información fue extraída el 16 de enero de 2024 para la levantar datos preliminares que deberán ser cotejados a nivel epidemiológico con bases de datos complementarias, por lo que son preliminares, lo que no significa que bajarán.

En efecto, fuentes consultadas por La Opinión de Chiloé indicaron que estas cifras deben ser miradas con cautela ya que es probable que el número definitivo de pacientes muertos esperando aumente debido a que sólo entre enero y diciembre de 2023, se añadieron otras 3.365 solicitudes sin resolver a las 27.872 ya existentes.

Sólo a modo ilustrativo, y tomando en consideración que el Ministerio de Salud confirmó que en 2022 habría un total de 445 chilotes que fallecieron en las listas de espera —52 de los cuales eran AUGE-GES y otros 393 eran no GES—, entonces es de esperar que, cuando se ajusten las cifras, se informe que 2023 terminó con cerca de 500 defunciones de personas en tales listas.

Para precisar, si bien una persona puede esta registrada en más de una lista de espera, también lo es que una persona puede haber fallecido y su registro en el SIGTE siga vigente como paciente «vivo» esperando atención, situación que puede solucionarse cuando se cruzan los datos con el DEIS o bien, de manera manual, esto es, cuando una operadora llama a algún familiar para decirle que su pariente «tiene hora» y éste le replica que ya murió.

Bajo estas condiciones, y si se mantuviera la tasa de decesos por cada 1.000 solicitudes en listas de espera que se registró en 2022, entonces en 2023 es probable que las defunciones de aquellos que no alcanzaron a atenderse llegue a 499 chilotes.

Luego, y retomando las cifras para 2023, el reporte enviado por el titular de la Subsecretaría de Redes Asistenciales, Osvaldo Salgado Zepeda, al Congreso Nacional mediante el Ord. n.°329 del 31 de enero de 2024 revela, en consecuencia, que casi tres de cada diez isleños que murió el año pasado, habría estado esperando atención de salud especializada o alguna cirugía.

En efecto, según el Departamento de Estadísticas e Información de Salud (DEIS) del Minsal, en el mismo período bajo análisis se registraron 1.393 defunciones de residentes en alguna de las diez comunas de la provincia de Chiloé, por lo que los 385 pacientes representan el 27,6% del total de muertos en 2023.

Y esto es preliminar, dado que si la tasa de decesos por cada 1.000 solicitudes en listas de espera se mantiene, entonces se podría llegar a hablar, de manera extremadamente alarmante, que 32% del total de muertos en 2023 era alguien en las susodichas listas, o sea, que casi 1 de cada 3 chilotes podría haber muerto sin acceder a salud.

Cabe mencionar que el 31 de diciembre de 2023 terminó con el número más alto de requerimientos pendientes en las listas de espera, contabilizándose en total 31.237 solicitudes aún sin resolver, representando un aumento del 12,07% respecto del 31 de diciembre de 2022.

Esta cifra es una de las peores jamás registradas en el Servicio de Salud Chiloé, posicionándola dentro de las de peor gestión en resolutividad en el país. Las causas son variadas, aunque aquellas escapan al objeto de este reportaje.

Precisando, para el año 2023 se observó en la Provincia un fuerte aumento en pacientes AUGE-GES no atendidos (creció 49,7%), un fuerte aumento en el número de cirugías pendientes (creció 12,6%) y un fuerte aumento de interconsultas para especialistas no resueltas (creció 10,5%).

Luego, y volviendo a los muertos esperando, si en general dentro de las defunciones totales registradas en Chiloé predominaron aquellos con algún tipo de cáncer o enfermedad asociada al sistema circulatorio o respiratorio, resulta razonable que esta tendencia se replique entre los pacientes de las listas de espera.

Aterrizado en cifras, durante el año 2023, el 23,4% de todos los fallecidos en el Archipiélago tenían algún tipo de tumor o cáncer, por lo que extrapolando, aproximadamente 90 personas fallecieron en sus casas esperando a que se les diagnostique o trate un cáncer evidente.

Por otro lado, un 21,3% de los que falleció en 2023 tenía alguna enfermedad relacionada al sistema circulatorio, ergo, alrededor de 82 personas habrían fallecido en sus casas esperando a que se les diagnostique o trate alguna cardiopatía o enfermedad cardíaca también evidente

En cuanto a las enfermedades respiratorias, que fue la tercera causa de defunción en 2023 en Chiloé, con un 12,6% del total, se puede indicar que aproximadamente 48 personas fallecieron esperando en sus casas a que se les diagnostique o trate por influenza, neumonía o alguna enfermedad pulmonar no asociada a COVID-19.

El documento, elaborado por el Departamento de Estudios, Innovación e Información para la gestión del Gabinete de dicha Subsecretaría indica que al menos 220 «egresos» fueron de pacientes varones que murieron esperando y al menos 165 fueron de pacientes mujeres, representando el 57,1% y 42,9% del total respectivamente.

Si se compara con las cifras de chilotes que fallecieron en 2022 en alguna de las listas de espera, se observa una tendencia similar en cuanto a que la proporción de varones que fallece esperando es mayor a la de las mujeres: 52,6% (234 casos) versus 47,4% (211 casos), respectivamente.

En cuanto a la edad, 289 personas eran mayores de 65 años, 95 personas tenían entre 15 y 65 años, y 1 era menor a 15 años, representando el 75,1%, el 24,7% y el 0,2% del total respectivamente.

El reporte a priori no señala alguna relación causa-efecto entre las muertes y la presencia de un paciente en alguna de las listas de espera, o sea, se basa en una revisión de registros administrativos que no contienen toda la historia clínica de las personas ni los antecedentes necesarios para establecer causalidad directa alguna.

¡Bienvenido! Puedes opinar y debatir respecto al contenido de esta noticia. En La Opinión de Chiloé valoramos todos los comentarios respetuosos y constructivos y nos guardamos el derecho a no contar con las opiniones agresivas y ofensivas. Sé parte de la conversación.

Comentarios