Un nuevo hallazgo científico que tiene como protagonista a los bosques del sur de Chile es el que acaba de publicar recientemente ZooKeys, revista con asiento en Bulgaria que alberga artículos sobre taxonomía zoológica, filogenia y biogeografía de todo el mundo.
Según la publicación titulada Gondwanamyia, a new empidoid (Diptera) genus of uncertain placement que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, investigadores canadienses del Canadian Food Inspection Agency y del Agriculture and Agri-Food Canada, más uno del National Museum Wales de Inglaterra y otro del Baikoen 2-Chome de Japón describieron dos nuevas especies de dípteros (insectos con sólo dos alas membranosas y no cuatro como el resto), una de las cuales está presente en el sur de Chile mientras que la otra en el norte de Nueva Zelanda.
Particularmente en el caso del insecto chileno, los investigadores entregan antecedentes sobre una nueva especie que denominaron Gondwanamyia chilensis Cumming & Saigusa, sp. n.; para esta descripción, se utilizó un insecto masculino capturado en el Parque Nacional de Puyehue en 1988 al que se unió otro del sector de Ahoni Alto, Queilen, encontrado el mismo año, dos varones y una hembra en el sector de Correntoso de Puerto Montt en 1989 y varios especímenes adicionales capturados en el Parque Nacional Puyehue en 1988, las comunas de Valdivia en 1982, La Unión en 1988 y Cochamó en 1986.
El tamaño de esta especie voladora oscila entre 1,1–1,4 milímetros. Posee ojos dicópticos, su cuerpo es alargado y sus alas tienen débiles pliegues cerca de la base; su abdomen posee pequeñas placas mientras que el tórax es café, más oscuro que el abdomen.
Tanto la especie chilena como la neozelandesa (Gondwanamyia zealandica Sinclair & Brooks, sp. n.) forman parte del nuevo género Gondwanamyia, posicionándose entre los empídidos voladores más pequeños conocidos hasta ahora. Probablemente son depredadores de artrópodos, pero nada se sabe actualmente de sus hábitos. Además se cree que es un género cuyas especies comienzan a volar a finales del otoño, por lo que su hábitat debe ser húmedo y frío.
Fotografía: ZooKeys 621: 137-147 (03 Oct 2016) doi: 10.3897/zookeys.621.10115
Comentarios