
Véase también:
Ancud: rotura de tubería de Essal provoca que fecas fluyan al mar, a pasos del centro.
Ancud: municipio anuncia acciones legales por enésimo vertimiento de fecas en la Bahía.
Ancud: 1.685 toneladas de caca (o m³) se vertieron en la Bahía tras rotura de Essal.
Ancud: municipio llevaría a Essal al Tribunal Ambiental de Valdivia tras contaminación de la Bahía.
ANCUD (La Opinión de Chiloé) — Un interesante informe elaborado por empleados de la Empresa de Servicios Sanitarios de Los Lagos, Essal, en Ancud acaba de indicar la potencial inexistencia de responsabilidades por el vertimiento de aguas servidas en las costas de la ciudad, todo en el marco de varias indagatorias abiertas por reparticiones públicas por una rotura de tubería a pasos del centro y el consecuente desagüe de afluentes contaminantes en el mar.
A través de un comunicado que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, la empresa indicó que debido a la rotura se obligó a “utilizar el aliviadero de emergencia para descargar aguas mixtas en la bahía de Ancud, ante el inminente riesgo sanitario para la comunidad, y a realizar trabajos para ubicar la rotura, repararla y así desactivar el aliviadero”.
Según datos de la Superintendencia de Servicios Sanitarios (SISS), mientras el aliviadero estuvo abierto, se vertieron 1.685 metros cúbicos de aguas servidas a la la Bahía de Ancud; considerando que cada metro cúbico representa un aproximado de 1.000 kg, entonces se vertieron 1.685 toneladas de residuos.
Agregó la compañía que “durante las operaciones de reparación, los técnicos constataron que la falla podría no deberse a un problema de operación o falta de mantención de la infraestructura, por lo que Essal ha considerado necesario determinar con claridad las causas que provocaron esta incidencia”.
Argumentan que «la tubería afectada, de PVC y con tan sólo 15 años de antigüedad, trabajaba en esos momentos a menos del 15% de la presión máxima de diseño. La vida útil de este tipo de tuberías es de 60 años». Sin embargo, no ha expuesto a nivel público la forma en que se llegó a tales conclusiones ni la metodología para arribar a las conclusiones donde se autoexculpa.
En dicho marco, anunció que presentó una denuncia ante el Juzgado de Garantía de Ancud para que ésta la «ayude» a determinar responsabilidades en la rotura de la tubería impulsora del sistema de la Planta de Tratamiento de Aguas Servidas Prat, ubicada en calle Lord Cochrane (a pasos del muelle), incidente que ocurrió este martes 10 de septiembre.
Mientras tanto, tal y como ya había adelantado La Opinión de Chiloé (ver nota relacionada), el alcalde de la comuna viajó hasta la ciudad de Valdivia para interponer una demanda ante el Tribunal Ambiental con el objetivo de exigir la reparación del daño provocado por el vertimiento de aguas contaminantes en el mar, culpando directamente a Essal.
Tras interponer la acción, la autoridad dijo: «creemos que deben ser sancionadas este tipo de conductas porque daña el medioambiente pero también perjudica a la pesca artesanal, a nuestros pescadores que diariamente salen a buscar sustento para sus hogares en esta extensa Bahía de Ancud».
En ese contexto, el municipio tendría en su poder documentación diversa donde Essal, de manera privada, haría reconocido su responsabilidad en los hechos, a pesar que públicamente se deslinda de aquélla.
Por otro lado, detectives de la Brigada Investigadora de Delitos Medioambientales y contra el Patrimonio Cultural, Bidema, de la PDI con asiento en Valdivia, fueron mandatados por el Ministerio Público para determinar la cronología en torno a la rotura y vertimiento. La información fue confirmada por el Comisario José Nova, quien señaló que su repartición ya inició las pericias respectivas.
Hay que mencionar que este informe de Essal se suma a otro estudio que mandó a realizar la empresa tras el hedor a fecas que afectó a miles de personas en marzo pasado, y que incluso tuvo a varios niños trasladados a un centro asistencial con síntomas de intoxicación. Ahí, la compañía descartó que tuviera responsabilidad: contrató a la consultora Enviro Métrica TSG que emitió un reporte donde aseguraba la inexistencia de coliformes fecales en la Bahía.
Sin embargo, posteriormente la Seremi de Salud de Los Lagos derribó de manera categórica aquello (ver nota relacionada) al confirmar valores superiores a los 16.000 coliformes por cada 100 mililitros de agua en las muestras que se tomaron en la desembocadura del Estero La Toma (cerca del Muelle), del Estero Matadero (en playa Fátima), los dos desagües de aguas lluvias en la Costanera y del emisario de Essal cercano al PEAS Yungay (frente a la desembocadura del Estero Matadero). Lo curioso es que según Essal, esos fueron prácticamente a los mismos lugares a muestrear y encontraron nada.
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