CASTRO/QUELLÓN (La Opinión de Chiloé) — Durante la mañana de este viernes se informó sobre un sigiloso operativo en las comunas de Castro y Quellón donde personal de la Policía de Investigaciones (PDI) detuvo a cinco personas presuntamente involucradas en un violento secuestro registrado en la ciudad de Rancagua.
De acuerdo a antecedentes de la causa a los que accedió La Opinión de Chiloé, el 17 de julio pasado un grupo de sujetos contactaron a un comerciante que vendía un camión vía redes sociales en Rancagua, y simularon querer comprarlo; una vez reunidos, lo intimidaron y lo ingresaron a un vehículo para llevarlo a un sitio eriazo. Ahí, los delincuentes le aplicaron tormentos con electroshock, golpes de pies y puños junto con agresiones en el cráneo con un objeto contundente. Mientras esto ocurría, uno de los secuestradores contactó a los familiares exigiendo la suma de cinco millones de pesos para liberarlo, entregando una serie de cuentas bancarias para los depósitos.
Dada la enorme gravedad del delito —el secuestro en Chile es duramente sancionado—, la Brigada Investigadora de Robos (BIRO) inició una serie de indagatorias gracias a la existencia de comprobantes de depósitos, interrogatorios y la presencia de una mochila abandonada en el sitio eriazo, donde según Marcelo Cabezas, subprefecto de la BIRE, se encontró un notebook y una carpeta con el mapa genealógico completo de la familia, lo que agravaría el delito.
Las diligencias permitieron determinar que el autor intelectual era un sujeto residente en Quellón, mientras que otras tres personas residentes en la ciudad puerto y en Castro habrían facilitado sus cuentas para las transferencias de dinero. Funcionarios de la Policía de Investigaciones en Castro y Ancud se unieron a la BIRO para coordinar la detención de los cuatro involucrados, que se sumó a la detención de un quinto el día de ayer, y que fue uno de los que propinó la golpiza y que tendría antecedentes anteriores por robo y golpear a mujeres.
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