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Castro: deterioro de segundo hospitalizado con COVID-19 obliga a ingresarlo a UCI.
CASTRO (La Opinión de Chiloé) — Luego de varias complicaciones de salud que obligaron a trasladarlo al Hospital Dr. Augusto Riffart de Castro, e ingresarlo a una unidad de tratamiento intensivo, finalmente durante este miércoles se confirmó que quien fuera el primer paciente COVID-19 conectado a ventilación mecánica de la comuna de Ancud, será dado de alta.
De acuerdo a fuentes consultadas por La Opinión de Chiloé, esta persona de sexo masculino estaba internado en el nosocomio de la capital provincial al menos desde el miércoles 22 de abril, ocupando inicialmente una cama de cuidados intermedios. Sin embargo, tras arribar, se agravó a nivel de respiratorio por lo que se decidió ingresarlo a cuidados intensivos y, consecuentemente, a respirador artificial.
Aunque su estado de salud se mantuvo bajo estricta reserva, La Opinión de Chiloé conversó brevemente con L.A.O.C., uno de los familiares directos del paciente en Ancud, quien confirmó en esa oportunidad que «nos han dicho que está estable y que está evolucionando bien, acabamos de llamar y nos dijeron lo mismo».
En efecto, fue hospitalizado inicialmente en el Hospital San Carlos de Ancud pero luego se optó por Castro al no existir Unidad de Paciente Crítico; es más, aún se espera la llegada de equipos para habilitar hasta 6 camas, sin que aún se sepa exactamente cuándo se concretaría.
La decisión del equipo médico del norte de Chiloé fue acertada porque a las horas de llegar a Castro, varios exámenes alertaron sobre la necesidad de apoyo respiratorio, quedando en calidad de grave.
Pues bien, a dos semanas de su derivación al recinto de salud de la capital provincial, este COVID-19 ancuditano podrá retornar a su domicilio luego que hace algunos días fuera desconectado de soporte respiratorio mecánico y trasladado hacia cuidados intermedios. Hoy está recuperado.
Al salir del hospital, P.O. dijo «estuve una semana conectado… me acuerdo bien poco porque uno con el medicamento pierde un poquito el conocimiento pero ahora ya estoy bien (…) estoy impecable».
Aseguró que «aquí estoy vivo, es la prueba más grande de mi vida que he pasado (…) yo les diría a la gente adulta y a los jóvenes que le tomen el peso a esto porque no es un juego…».
Uno de sus médicos tratantes señaló que «lo tuvimos entubado y ventilado en sedación profunda al menos unos seis días, con todo el tratamiento que ya se ha estipulado en forma internacional obteniendo estos buenos resultados (…) estuvo en una UCI, lugar donde se pueden descompensar y fallecer en cualquier momento, en este caso no fue así… por suerte».
Otra de las profesionales que lo trató se refirió a lo que se hace con este tipo de enfermos: «al principio cuando ellos llegan graves, porque él estuvo grave, no se dan cuenta aunque llegan con mucha dificultad respiratoria… rápidamente uno tiene que ayudarlos con un ventilador quedando sedados… ellos no se dan cuenta mucho de su gravedad y su puesta al día en cuanto a lo que le ha pasado es cuando despiertan».
Aseveró que «quizás los que más sufren, aparte del personal de salud que lo único que quiere ayudarlo, es la familia que no lo logra ver, y como no pueden venir acá uno tiene que contarles un poco, tratar de contarles como van por teléfono. Eso crea mucha angustia en ellos y uno tiene que tratar de bajarla».
José Francisco Ricaurte, Director (s) del hospital de Castro, se refirió al trabajo que realizaron precisando que es el primero de los dos pacientes COVID-19 que han ingresado a cuidados intensivos que es dado de alta. La Opinión de Chiloé confirmó que la otra persona, una mujer de 53 años de edad, también está respirando por sus propios medios y pasó a cuidados intermedios (podría ser dada de alta esta semana).
Dijo la fuente sobre el ancuditano que «él tuvo diagnóstico [COVID-19] el 6 de abril, posteriormente ingresó a Castro el 22 de abril, después de eso se conectó a ventilación mecánica por seis días hasta hace algunos días atrás en que se desconectó, se vio su evolución y ahora se va de alta».
Llamó a mantener las medidas de autocuidado para evitar más casos, hay «ser responsables con la salud de uno, lo que a su vez, nos hace responsables de la de los demás», asestó.
La Seremi de Salud de Los Lagos, Scarlett Molt, indicó al conocerse la noticia que «no estaba informada en detalle, pero eso lo único que demuestra es que los equipos de la Provincia de Chiloé, específicamente del Hospital de Castro, lo han hecho excelente (…) la red de salud está funcionando con profesionales que están totalmente comprometidos».
Calificó como «un éxito y un logro» el hecho de que el paciente pudiera superar «la máxima complejidad de salud en este caso».
Sobre la otra paciente, Ricaurte aseguró que «está bastante bien, ella también está desconectada de ventilación mecánica; estamos esperando que recupere su musculatura en general (…) era respira sola, se mueve, conversa, pero todavía falta recuperar su estado muscular para que se pueda autovaler».
Se la observará dentro de 24 y 48 horas más, y probablemente pueda ser dada de alta tras ese período. En términos de COVID-19, ya se la considera prácticamente como recuperada.
Sobre los positivos, Ancud lidera en la provincia de Chiloé con 18 casos positivos detectados en la región (más uno en Santiago), siguiendo Castro con siete y Quinchao con uno.
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