CASTRO (La Opinión de Chiloé) — Un violento incidente registrado este martes en el centro de Castro terminó con la detención de un joven sindicado como eventual responsable de haber atacado, cobardemente, a una Carabinero de servicio provocándole lesiones de carácter grave.
De acuerdo a antecedentes judiciales que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, el sujeto habría sido partícipe de algunos incidentes ocurridos en la capital provincial que terminaron con detenidos, hechos vinculados a ataques a la propiedad pública y privada además de agresiones a Carabineros, lo que determinó activar la acción de la fuerza policial.
Fue en calle O’Higgins, frente a la Gobernación de Castro, que el adolescente oriundo de Quellón, Raúl Nicolás Llanllán Rubio (18 años), fue aprehendido.
Fuentes conocedoras del caso refirieron que el sujeto habría decidido golpear de improviso a la carabinera G.L.R., provocándole una severa fractura de clavícula, siendo ella trasladada al Hospital Dr. Augusto Riffart de Castro donde la lesión fue catalogada de carácter grave.
Es falso que haya existido algún enfrentamiento entre ambos, dado que se asegura que la agresión se dio cuando el joven ya estaba detenido, instantes en un descuido atacó a la funcionaria. El aludido también fue derivado a un centro de salud donde el médico de turno certificó la inexistencia de lesiones.
El fiscal de la causa, Enrique Canales, informó que Llanllán Rubio «fue detenido el martes pasado en el contexto de desórdenes producidos, a propósito de la rendición de la prueba de Selección Universitaria en la ciudad de Castro».
Hay registros audiovisuales donde se observa a varios adolescentes acercarse a Carabineros que estaban en una esquina de la Plaza de Armas, y ahí comenzaron a increparlos con insultos, observándose además que a varios de ellos les propinaron patadas, escupitajos y empujones. El imputado sería uno de ellos.
Aseguró el fiscal que «en tales circunstancias, y al momento de ser detenido, esta persona agredió a una funcionaria de carabineros, la que resultó con una fractura de clavícula, lesión de carácter grave, y fue el fundamento principal acogido por la corte a propósito de la circunstancias, gravedad del hecho y la pena que esto lleva asociado».
En vista y considerando los antecedentes, el imputado fue formalizado como presunto autor en grado de consumado del delito de Maltrato de Obra a Carabineros con lesiones graves y del delito de Desórdenes públicos, decretándose en primera instancia su arresto domiciliario total más 90 días de investigación.
Sin embargo, el Ministerio Público no quedó conforme toda vez que la dinámica de los hechos y la gravedad de la lesión a la funcionaria implicarían, de prosperar la causa, una dura sanción para el joven que implicaría cárcel por hasta 10 años.
Así, se recurrió ante la Corte de Apelaciones de Puerto Montt que durante la mañana de hoy impuso la medida más gravosa: prisión preventiva.
Lo ocurrido no es menor dado el tipo de agresión que se le propinó a la Carabinera; en efecto, Llanllán Rubio arriesga penas que van desde presidio menor en su grado máximo a presidio mayor en su grado mínimo, vale decir, penas de cárcel que van desde tres años y un día hasta los 5 años en el primer tramo o bien, penas de cárcel que van desde los 5 años y un día hasta los 10 años de cárcel en el segundo tramo.
Así lo confirmó el trío de magistrados en Puerto Montt quienes apreciaron que existía mérito suficiente para estimar que se configuraría un delito que podría terminar en cárcel efectiva.
El plazo de investigación quedó finalmente en 100 días. Cabe mencionar que los incidentes, a propósito de la rendición de la PSU, tuvo como saldo en Castro a cuatro detenidos, incluyendo el ahora en prisión preventiva.
Los otros tres, fueron por desórdenes públicos, siendo formalizados y dejados en libertad. Uno de ellos aseguró que habría sido «violentamente golpeado», sin embargo, en los certificados de constatación de lesiones realizadas en el Hospital local, no hay registros de algún adolescente que haya llegado con lesiones atribuibles a alguna golpiza. La institución estaría evaluando una querella criminal por injurias y calumnias.
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