CASTRO (La Opinión de Chiloé) — A casi 16 meses de ocurridos los hechos, finalmente durante las últimas horas el Juzgado de Garantía de Castro sentenció a un taxista coyhaiquino como autor en grado de consumado del delito de secuestro con violación de mayor de 14 años, todo tras confesar la autoría del ilícito ocurrido en enero del año pasado.
De acuerdo a antecedentes judiciales que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, los hechos se remiten a la tarde del lunes 15 de enero de 2018 cuando la víctima concurrió al domicilio de Giuliano Salvatore Gaspare Cossio Nonque (52 años) ubicado en calle Eleuterio Ramírez, y ya en su interior, bebió una bebida que habría contenido una sustancia psicotrópica desmayándose. Al despertar varias horas después, se encontró en una cama semidesnuda junto a su violador con claros signos de haber sido ultrajada; según la mujer, el taxista la retuvo amenazándola con un arma blanca y obligándola a consumir antisicóticos usados para el tratamiento de la esquizofrenia hasta la madrugada del día miércoles 17 de enero cuando pudo escapar por un descuido del aludido. Se sumó a ello el consumo de pasta base de cocaína.
La joven llegó a la Segunda Comisaría de Castro descalza y con algunas lesiones cortopunzantes en varias partes de su cuerpo y procedió a estampar la denuncia diciendo que estuvo alrededor de 36 horas retenida en el domicilio del transportista y que fue violada. El Ministerio Público instruyó, en consecuencia, a la Brigada de investigación Criminal de la PDI de la capital provincial y a la Brigada de Delitos Sexuales y Menores de la PDI de Ancud la realización de varias diligencias, recopilándose datos suficientes como para formalizarlo como eventual autor del delito de secuestro con violación de mayor de 14 años, quedando en prisión preventiva.
Durante las indagatorias, la mujer de 25 años declaró que llegó al lugar no porque haya tenido alguna relación sentimental con el delincuente como él alegaba, sino que para pagar una deuda por marihuana reconociendo que era su proveedor habitual ya que él se dedicaría al microtráfico; en ese proceso, le ofreció una bebida con las consecuencias ya detalladas.
A más de un año, y tras asegurar por largo tiempo que todo fue consentido, finalmente el delincuente reconoció a través de un procedimiento abreviado los hechos materia de la acusación y fue condenado a cumplir una pena efectiva de tres años y un día de presidio; sin embargo, fuentes indicaron a La Opinión de Chiloé que probablemente pueda pedir libertad condicional durante el segundo semestre de 2019 toda vez que se abonarían los meses que estuvo en prisión preventiva.
Hay que mencionar que el artículo 141 del Código Penal indica que el delito de secuestro con violación será castigado con presidio mayor en su grado máximo a presidio perpetuo calificado, mientras que la configuración de la agresión sexual en el caso de este taxista estaría descrito en el artículo 361 número 2° del mismo cuerpo legal donde se indica que comete violación el que accede carnalmente a una persona mayor de catorce años cuando la víctima se halla privada de sentido, o cuando se aprovecha su incapacidad para oponerse, algo que habría ocurrido en la especie ya que la joven estaba bajo los efectos de las drogas. En vista de la ruda pena, el sujeto prefirió ir a un procedimiento abreviado y evitar el juicio.
Comentarios