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Chonchi: fiesta clandestina termina con un brutal homicidio.
CHONCHI (La Opinión de Chiloé) — Una arista policial relativamente sorpresiva dejó un brutal homicidio ocurrido durante la madrugada de este sábado en la comuna de Chonchi, todo luego que en medio de los peritajes para determinar la dinámica de lo que pasó, se produjera el hallazgo de sustancias prohibidas en el domicilio donde se registró el crimen.
De acuerdo a información policial que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, fueron detectives de la Policía de Investigaciones de Castro quienes abordaron el procedimiento inicial por un presunto homicidio frustrado, que luego mutó a un presunto homicidio simple tras confirmarse la muerte de Luis Raúl Oyarzún Carrasco (25 años) en el Cesfam de Chonchi.
Así, y en medio de las diligencias investigativas propias de su especialidad, una serie de interrogantes levantó el sorpresivo arribo de funcionarios de la Unidad de Microtráfico Cero (MT0) de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) a la vivienda ubicada en el pasaje 2 de calle Bernardo O’Higgins donde se registró el hecho de sangre.
En particular, fuentes consultadas por La Opinión de Chiloé indicaron que tras ingresar a esta propiedad para recopilar medios probatorios producto del asesinato, se encontró alrededor de 700 gramos de marihuana avaluada en aproximadamente de 3,5 millones de pesos, todo mientras el dueño de casa estaba en calidad de inubicable.
Además, se añadieron posteriormente otras 45 plantas de Cannabis sativa cuyo peso no se ha revelado aún, abriéndose en consecuencia, otra arista penal ante un posible ilícito vinculado al tráfico de drogas en Chonchi.
Lo que se sabe hasta ahora es que denunciada la agresión con arma blanca donde murió Oyarzún Carrasco, el sitio del suceso quedó resguardo por personal de Carabineros con una patrulla en el frontis de la casa (no podían entrar sin previa autorización judicial), y que en tal contexto, el dueño de casa —completamente identificado— habría salido por otro lado.
Según el Fiscal Adjunto de Castro, Fernando Metzner, el sujeto habría prestado previamente declaración en calidad de testigo ante personal de la Bicrim de Castro respecto al incidente, pero cuando llegó la Brigada de Homicidios junto con el Laboratorio de Criminalística de Puerto Montt y otros detectives castreños a la vivienda, ya nadie respondía desde el interior los llamados de funcionarios policiales.
Hasta ese momento se desconocía el porqué nadie abría la puerta, por lo que se tuvo que pedir autorización judicial para entrar.
Así las cosas, y determinándose que el aludido estaba inubicable como para que diera autorización de ingreso de la vivienda, la juez de garantía Alejandra Varas Cuevas autorizó el allanamiento con facultades de descerrajamiento en caso de ser necesario, sin notificación previa, con el objetivo de trabajar en distintos peritajes.
Más allá de la existencia de diversas causas penales del sujeto que se tramitan ante tribunales, en ese momento no habían antecedentes de otros potenciales ilícitos que hayan ocurrido en la propiedad; sin embargo, tras el ingreso, se encontraron las sustancias en su interior.
La información sobre el hallazgo fue confirmada por la propia Policía de Investigaciones, quienes explicitaron que era efectivo que todo fue habido en el inmueble donde se realizó la fiesta clandestina, por lo que se está indagando a todos los asistentes.
En cuanto a la causa penal por el asesinato, el presunto responsable fue sometido a control de detención y formalización de la investigación como eventual autor en grado de consumado de un delito de Homicidio simple que prevé y sanciona el artículo 391 n.°2 del Código Penal.
La dinámica de lo que pasó se está investigando, aunque una de las hipótesis que se trabaja es que el ahora fallecido se involucró en una riña con uno de sus amigos, que terminó cuando éste se fue del lugar, mientras el ahora fallecido volvió a la fiesta.
Sin embargo, minutos después habría aparecido el padre del amigo con su hijo y un tercero no identificado, procediendo el primero a enfrentarse verbalmente con el aludido, aumentando la intensidad de la discusión hasta terminar por apuñalarlo en varias ocasiones.
El herido fue trasladado hasta el Centro de Salud Familiar de Chonchi en estado crítico, lugar donde falleció. La información fue confirmada por el subprefecto Alejandro Pino, jefe de la Bicrim de la PDI de Castro, quien al comienzo aseguró que concurrieron a la ciudad de los tres pisos por un presunto homicidio frustrado, pero que mientras viajaban a la ciudad, se les avisó que ya era un homicidio propiamente tal luego de constatarse el fallecimiento.
Dijo también que todo pasó «de acuerdo a los primeros antecedentes que al momento [se] está trabajando (…), en el contexto de lo que se denominaría una fiesta clandestina al interior del domicilio».
Fuentes independientes indicaron a La Opinión de Chiloé que la muerte habría sido por un shock hipovolémico por herida de arma blanca penetrante. El cuerpo presentaba al menos tres puñaladas.
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