ANCUD (La Opinión de Chiloé) — Una serie de diligencias investigativas están realizando funcionarios de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales y Menores (Brisexme) de la Policía de Investigaciones de Ancud luego que en medio de la tramitación de una causa en el Juzgado de Familia de esta ciudad, se destapara una serie de actos que podrían ser constitutivos de algún tipo de abuso sexual donde la víctima sería una menor.
De acuerdo a información reservada que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, los hechos habrían comenzado en una fecha indeterminada del año 2017 cuando la víctima, de 12 años de edad, comenzó a ser objeto de actos de significación sexual reiterados, extendiéndose éstos hasta el año 2018 cuando quedaron al descubierto.
Los datos preliminares indican que los ultrajes presuntamente ocurrieron en distintas viviendas tanto en la comuna de Ancud, provincia de Chiloé, como en Hornopirén de la comuna de Hualaihué, provincia de Palena, todo en medio de graves vulneraciones sufridas por la menor y que, inicialmente, se ventilaron en el Juzgado de Familia.
Desde maltratos y situaciones vinculadas a un evidente abandono, aparecieron actos vejatorios de índole sexual por lo que se derivó la denuncia respectiva al Ministerio Púbico de Ancud, la que en un comienzo individualizaba explícitamente a un imputado.
En efecto, fuentes consultadas por La Opinión de Chiloé indicaron que éste sujeto era un adulto mayor de 81 años de edad quien posteriormente, sería formalizado por estos hechos.
Sin embargo, de manera reservada, el aludido acccedió a una suspensión condicional del procedimiento tras una solicitud que hizo el fiscal al Juzgado de Garantía, por lo que la tramitación de la causa se paralizó a la espera que se cumpla el plazo respectivo para su archivo, ordenándosele que mientras tanto, se mantenga alejado de la víctima y que informe un domicilio.
En términos prácticos, trancurrido el plazo y si se ha cumplido con los requisitos mencionados, la causa se terminará definitivamente sin que quede registro en el certificado de antecedentes, además de extinguirse la acción penal. Algo así como un sobreseimiento definitivo.
Aparentemente la avanzada edad de este pederasta fue objeto de preocupación en la Fiscalía, razón por la cual se decidió «dejarlo tranquilo».
Si bien es cierto el fondo de este caso no se discutió ante el juez de turno cuando el anciano fue formalizado, la indagatoria continuó dado que se pudo identificar a otros cuatro sujetos que habrían atacado a la niña, los cuales están completamente identificados.
En particular, recientemente dos de ellos enfrentaron una audiencia de formalización como presuntos autores en grado de consumado del delito de abuso sexual propio o directo (de menor de 14 años de edad), ilícito descrito y sancionado en el artículo 366 bis del Código Penal.
Tras un acalorado debate, sólo a uno de ellos se le pudo formalizar, mientras que respecto al otro, el juez se declaró incompetente por problemas de jurisdicción, remitiendo el trámite hacia el Juzgado de Letras, Garantía y Familia de Hualaihué, dado que las agresiones de él no fueron en Ancud sino que en Hornopirén.
A diferencia del anciano de 81 años, en el caso del segundo que pudo ser formalizado se decretaron las medidas cautelares de arraigo nacional y prohibición de acercarse a la víctima. Sobre el otro, deberá esperar citación desde la provincia de Palena, siempre y cuando no se fugue de Ancud y/o que la dirección que haya entregado sea la correcta para que lo puedan notificar.
Cabe mencionar que hay otros dos imputados adicionales que se unirían al procedimiento en Hualaihué dado que la menor fue víctima no sólo del ya referido, sino que también de estos sujetos.
Así las cosas, por ahora serían cinco los que han sido objeto de investigación por parte de la Brisexme por su eventual responsabilidad en los abusos. El Fiscal a cargo de la causa sería Javier Amado Calisto Garai.
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