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Dalcahue: emanación de amoníaco en planta Blue Shell envió a la ACHS a 11 intoxicados.
DALCAHUE (La Opinión de Chiloé) — A la espera de ser vistos en la Corte de Apelaciones de Puerto Montt y en el Juzgado de Letras y Trabajo de Castro se encuentran actualmente dos recursos judiciales interpuestos por la empresa Blue Shell ubicada en Teguel Bajo, Dalcahue, y que busca dejar sin efecto igual número de sanciones decretadas por la Dirección del Trabajo y la Autoridad Sanitaria respectivamente tras un grave incidente ocurrido en julio del año pasado, y que terminó con el traslado de 11 personas a la ACHS (10 mujeres y 1 varón).
De acuerdo a documentación que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, los hechos se remiten a dos indagatorias iniciadas por los organismos en comento luego que el 23 de julio de 2018 se presentara una fuga de gas amoníaco desde la planta de procesos de Blue Shell, y que obligó a evacuar a 63 personas confirmándose posteriormente que «11 presentaron algún signo de afección por el incidente antes expresado, siendo éstas derivadas a la ACHS y dadas de alta de forma inmediata» según la propia empresa.
El tema no se ha cerrado a pesar que ya ha pasado más de un año del accidente, y La Opinión de Chiloé ha confirmado que hay dos sendas batallas judiciales por las fiscalizaciones que se realizaron posterior a la emergencia, y que terminaron en dos multas que suman un total aproximado de 9,5 millones de pesos.
Los montos se determinaron en virtud de las que serían varias infracciones a la normativa sanitaria y laboral vigente, sanciones que actualmente son fuente de litigios en Puerto Montt (uno de segunda instancia luego de ser elevado desde sede judicial en Castro).
La fuga de gas amoníaco
Blue Shell ha reconocido que alrededor de las 00.30 horas del 23 de julio de 2018, al activar personal de mantención el ventilador del túnel de congelado de la línea de media concha, se detectó un fuerte olor a amoníaco; se realizaron mediciones encontrándose niveles en el ambiente llegaban a 80 ppm, siendo el límite permitido 22 ppm.
Así, se paralizó por varias horas las faenas registrándose un total de 11 personas que sintieron sintomatología vinculada a algún tipo de intoxicación, por lo que fueron trasladadas a un recinto asistencial. La planta retomó funciones durante la madrugada ese mismo día luego de varias acciones «correctivas» de la empresa. Sin embargo, más allá de las medidas que se llevaron adelante, los organismos competentes incoaron acciones sancionatorias luego de constatar que Blue Shell habría dilatado —sin causa aparente— el informar lo acontecido en su planta por más de 10 horas.
En efecto, solamente existen registros oficiales de aquello cuando ya el turno afectado había terminado, cuando los 11 trabajadores estaban dados de alta de la ACHS y cuando la planta se encontraba operando tras limpiar, ventilar y reanudar sus operaciones.
Las sanciones
El 4 de abril de este año, la Seremi de Salud de la Región de Los Lagos emitió la resolución exenta n.°1910155 donde informó una multa por 50 UTM (alrededor de $2.417.650.-), por infringir, según se lee de este documento, las disposiciones de los arts. 3 y 37 inc. 1° del DS 594/99 de 1999 del Ministerio de Salud, vale decir, que por un lado la empresa no mantuvo las condiciones sanitarias y ambientales necesarias para proteger la vida y la salud de los trabajadores, y por la otra, no suprimió todos los factores de peligro que puedan afectar la salud o integridad física de sus trabajadores.
En la resolución la Autoridad Sanitaria indica que los representantes de Blue Shell fueron citados a una audiencia de presentación de descargos y medios probatorios en sus dependencias de Castro, pero nadie asistió. Por tal razón, se decidió sancionarla en rebeldía, estimándose aquello como una agravante.
Conocida la multa, la empresa recurrió al Primer Juzgado Civil de Puerto Montt para intentar dejar sin efecto la sanción de la Seremi. Esa acción sigue su curso dado que aún no se realiza la notificación respectiva para poder fijar audiencia de contestación y conciliación.
Por otro lado, el 31 de julio de 2018, la Inspección Provincial del Trabajo de Castro emitió la resolución de multa n.°7818/18/9 donde sanciona con 150 UTM (alrededor de $7.152.150.-) por no informar “inmediatamente” al fiscalizador laboral el accidente “grave” ocurrido en la planta, acusando que la empresa dio aviso recién a las 10.55 horas del mismo día, vale decir, más de 10 horas después de la fuga de gas amoníaco. Se estima que infringió los inc. 4° y final del art. 76 de la Ley 16.744 en relación con el art. 184 del Código del Trabajo.
Conocida la sanción, la empresa recurrió al Juzgado de Letras y Trabajo de Castro para intentar dejarla sin efecto alegando que si habría informado «inmediatamente» el incidente, alegación que el juzgado desechó tajantemente ya que en autos se observó que existió una demora de más de 10 horas. Así, la magistrado confirmó la multa.
Dentro de sus argumentos, la juez dijo en el considerando quinto que: «(…) siendo argumento de la reclamación que ante la fuga de amoníaco la empresa paralizó faenas, limpió, ventiló, reanudó faenas y continuó trabajando en la planta, resulta evidente que la comunicación que debió hacer no fue de manera inmediata, debido a que desplegó muchas otras conductas que dan cuenta de que no se encontraba imposibilitado de hacerlo. En este punto también es importante que la empresa no alega falta de acceso a Internet o de líneas telefónicas, sino que simplemente era de noche, lo que no tiene ningún asidero, ya que en la experiencia de esta Jueza, las empresas de esta jurisdicción tienen conocimiento de sus canales de comunicación con entes fiscalizadores, más aun si hablamos de una empresa de años de trayectoria como lo es Blue Shell».
En particular, existía un número de teléfono 600 que funcionaba las 24 horas, existían formularios en la página web y existían los correos electrónicos, entre otras opciones, todos donde podría haber informado a la Inspección del Trabajo sobre lo que pasaba, pero no lo hizo sino hasta 10 horas después de activada la alarma. Luego, en el considerando sexto finaliza la juez diciendo que «el argumento de la reclamante en cuanto a que es inoficioso dar aviso a las autoridades por ser de noche/madrugada y que eso le da lugar a arbitrariedades respecto a qué es avisar inmediatamente, no resiste ningún análisis jurídico«.
Tras ello, Blue Shell concurrió a la Corte de Apelaciones de Puerto Montt para buscar anular el fallo, causa que se encuentra aún en trámite.
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