DALCAHUE (La Opinión de Chiloé) — Satisfacción existe al interior del Ministerio Público de Castro luego que la Corte de Apelaciones de Puerto Montt confirmara el 29 de abril pasado la sentencia condenatoria tras un aberrante caso de violación en contra de una niña de 12 años, y que terminó por sentenciar al pederasta a una pena de 5 años y 1 día de presidio.
De acuerdo a información del caso que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, los hechos se remiten a septiembre de 2013 cuando Eduardo Alexis Torres Torres (39 años, apodado «el Chanti») solicitó arrendar una cabaña emplazada en calle Manuel Rodríguez de la comuna de Dalcahue indicando que andaba de paso con su pequeña hermana y que necesitaban un lugar donde quedarse; justificó el pedido añadiendo que estaban acampando y que no tenían dónde dormir y/o ducharse. En tal marco, el dueño de «La Fiera» les facilitó el lugar pero alrededor de media hora después encontró sorpresivo que ambos se retiraran, por lo que procedió a revisar encontrando sangre en las sábanas pero no realizó denuncia alguna.
El tiempo pasó y la menor se atrevió finalmente a contar lo que ocurrió a dos profesoras de su escuela, quienes decidieron poner los antecedentes ante la justicia; sorpresivamente, sólo dos años después recién se materializó una indagatoria policial, aparentemente por dilación de los padres. La niña habría aseverado que el pederasta —que era amigo de sus progenitores— la violentó a pesar que intentó defenderse, y que posteriormente fue amenazada de muerte sumándose dichos donde el delincuente aseguró que asesinaría a sus padres y a su pequeño hermano.
Ya con la investigación en marcha a cargo de la Brigada investigadora de delitos sexuales y menores de Ancud (Brisexme), se pudo determinar la dinámica del ilícito, añadiéndose que la víctima relató otros dos supuestos episodios, uno de los cuales habría sido en presencia de su hermano que sufre autismo. Eduardo Alexis Torres Torres, quien visitaba su casa desde Puerto Montt, le habría pedido a la niña que lo acompañe a arrendar una cabaña para un amigo que llegaría de Osorno, procediendo a atacarla.
Con todos estos antecedentes, a comienzos de diciembre de 2018 se realizó el juicio oral donde los magistrados del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal, más allá de toda duda razonable, dieron por acreditada la violación ocurrida en la cabaña, sentenciándolo a 5 años y 1 día de cárcel. El pederasta esperaba la lectura del fallo en libertad, mientras que instruyó a su abogado particular el pedir anulación de juicio ante la Corte de Apelaciones de Puerto Montt.
Fue así que el 29 de abril reciente los jueces del tribunal de alzada confirmaron el fallo, por lo que el delincuente debiera ingresar a cumplir cárcel efectiva. Además, se aplicó a Torres Torres las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos; la inhabilitación absoluta para profesiones titulares durante el tiempo de la condena; la interdicción del derecho de ejercer la guarda y ser oído como pariente en los casos que la ley designa; la sujeción a la vigilancia de la autoridad durante los 10 años siguientes al cumplimiento de la pena principal, y la inhabilitación perpetua para cargos, empleos, oficios o profesiones ejercidos en ámbitos educacionales o que involucren una relación directa y habitual con personas menores de edad.
Una vez ejecutoriado el fallo, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas del sentenciado para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.
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