QUEILEN (La Opinión de Chiloé) — Una rápida tramitación en el Juzgado de Garantía de Castro tuvo un violento accidente de tránsito registrado la noche del viernes antepasado en la comuna de Dalcahue, y que tuvo como protagonista a un sujeto que manejaba en manifiesto estado de ebriedad.
De acuerdo a información judicial que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, el incidente ocurrió alrededor de las 21.30 horas del 12 de febrero de 2021 cuando Juan Evaristo Vidal Barrientos conducía erráticamente por una ruta rural una camioneta patente IS-1661, encontrándose de frente con otro móvil colisionándolo violentamente.
Así lo explicó el Ministerio Público de Castro ante el juez de turno, acusando que el delincuente ya individualizado iba en estado de intemperancia manejando a la altura del kilómetro 60 del sector Carihueico, y que producto de eso, impactó a otra camioneta frontalmente.
El móvil colisionado resultó con daños de consideración en su parte delantera mientras que el copiloto del conductor sufrió diversas lesiones, siendo trasladado a un centro asistencial para constatar lesiones; fue diagnosticado con diversas contusiones.
Vidal Barrientos en tanto, fue detenido por Carabineros de la Tenencia de Dalcahue y puesto a disposición de la justicia, no sin antes verificar su ebriedad con una prueba de alcotest, la que arrojó un resultado de 1,60. Además, el fiscal aseguró que al momento de requerirle sus documentos, el sujeto señala que no cuenta con licencia de conducir.
Se debe agregar que constó en los funcionarios policiales su rostro congestionado, incoherencia al hablar, inestabilidad al caminar y hálito alcohólico.
En este contexto, la Fiscalía ofreció un requerimiento verbal en procedimiento simplificado, el que fue aceptado por la defensa del imputado al existir antecedentes penales anteriores que podrían derivar en la imposición de una pena de cárcel efectiva de llegar a juicio.
Así, se le procedió a condenar en su calidad de autor de un delito de conducción en estado de ebriedad sin licencia de conducir causando daños y lesiones leves, ilícito previsto y sancionado en el artículo 110 en relación al artículo 196 y 209, inciso 2° de la Ley de Tránsito, en estado de desarrollo de consumado, a una pena de 61 días de presidio menor en su grado mínimo, al pago de una multa de alrededor de $9.000.- y a la suspensión de la licencia de conducir por el término de dos años.
La multa se dio por pagada debido a que estuvo detenido un par de horas esperando la audiencia de control de detención. Sobre la suspensión de la licencia, esta es una medida impracticable al no tener alguna.
Luego, para el cumplimiento de la pena privativa de libertad, y reuniéndose los requisitos de la ley, se le sustituyó la pena de presidio por la de remisión condicional de la pena, esto es, quedar bajo el control de Gendarmería de Chile por el plazo de un año pero libre.
Según el Centro de Documentación Defensoría Penal Pública, una suspensión condicional del procedimiento «consiste en un acuerdo entre fiscal e imputado por el cual se suspende la investigación y el procedimiento por un tiempo determinado, entre 1 y 3 años –según los Arts. 237 y 238 CPP– durante el cual se somete al imputado al cumplimiento de ciertas condiciones decretadas por el juez de garantía, de tal manera que si las cumple y no es objeto de una nueva formalización por hechos distintos, se extingue la acción penal por los ilícitos que motivaron la investigación, debiendo el tribunal de oficio, o a petición de parte, dictar sobreseimiento definitivo. Requiere que previamente se haya formalizado la investigación y, una vez que se haya dado a conocer en audiencia pública, sea aprobado por el juez de garantía».
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