ANCUD (La Opinión de Chiloé) — Un nuevo hecho de violencia hacia un funcionario del Hospital San Carlos de Ancud se registró durante la madrugada de este martes luego que un detenido escoltado por Carabineros golpeara a una técnico paramédico.
De acuerdo a antecedentes preliminares recopilados por La Opinión de Chiloé, el aludido llegó al nosocomio para realizarle una constatación de lesiones tras ser aprehendido por funcionarios policiales alrededor de las 3.00 horas. Tras retirársele las esposas, el sujeto identificado como Boris Huineo Legue (24 años) habría propinado varios golpes de puño a A.B.G. (57 años), profesional que lo estaba atendiendo.
Desde la dirección del recinto asistencial se ha indicado que evalúan interponer acciones legales que en términos prácticos implicaría hacerse parte de la potencial acusación luego que el Ministerio Público de Ancud ya tomara cartas en el asunto. Así, el sujeto fue formalizado durante la mañana de este miércoles como presunto autor del delito de lesiones menos graves, quedando con la medida de cautelar de prohibición de acercarse a la víctima, solo a excepción que deba concurrir al Hospital de Ancud por alguna necesidad de salud en el Servicio de Urgencia y que inevitablemente implique acercarse a la víctima. Se decretaron 120 días de investigación.
La Opinión de Chiloé verificó que el sujeto posee antecedentes que lo vinculan a otros actos violentos, incluyendo una sentencia del año 2016 por golpear a su propia madre en una vivienda de Villa Solidaridad, Ancud. En esa ocasión, fue sentenciado como autor del delito consumado de lesiones menos graves en contexto de violencia intrafamiliar tras propinarle una golpiza a su progenitora el día 2 de septiembre de 2015 en Ancud, recibiendo una multa de 2 UTM.
Además, se decretó que debía someterse a una evaluación, y eventual tratamiento para el control de impulsos en el Consultorio Manuel Ferreira Guzmán de esta ciudad, en un período establecido entre seis meses y un año. El tribunal informó al recinto según indica el Oficio n.°362-2016 del 2 de marzo al que accedió La Opinión de Chiloé, desconociéndose si los funcionarios tramitaron la orden.
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