Véase también:
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CHACAO, ANCUD (La Opinión de Chiloé) — Controversia y preocupación ha causado una serie de fotografías difundidas por trabajadores del Puente Chacao que darían cuenta de eventuales problemas de ejecución en la construcción de este megaproyecto, poniendo en el ojo crítico al trabajo que están realizando los profesionales a cargo de la inspección técnica de obra, y que estaría en manos del Ministerio de Obras Públicas.
Las imágenes muestran lo que se denomina un «nido» en el hormigonado de uno de los pilotes de la pila sur del puente, y que según fuentes consultadas por La Opinión de Chiloé, es un tipo de imperfección que requiere ser analizado en profundidad para determinar si existe alguna implicancia estructural. Desde el Grupo Polpaico, se indica que «por lo general, este tipo de fallas se produce por un inadecuado vibrado del hormigón».
El Seremi de Obras Públicas de la región de Los Lagos, James Fry, confirmó esta hipótesis indicando que «cuando uno saca un moldaje, pueden existir estos nidos que es, en el fondo, cuando se hace la vibración del hormigón quedan estos vacíos y los intertantos entre el acero».
Indicó que se detectó este problema «al sacar los moldajes de una de las pilas (…) ¿Qué se hace de forma inmediata?, se evalúa por parte de la constructora, en este caso el Consorcio, la asesoría de la inspección fiscal y el inspector fiscal del Ministerio de Obras Públicas con todo el equipo que está conformado, y se determina qué fue [lo que ocurrió en lo observado en] la foto que se viralizó».
En cuanto a las medidas para repararlo, dijo que «se pica hasta poder sacar completamente la parte que está suelta (…) que este hormigón que quedó con moléculas de aire al interior al no ser ligado correctamente, o no se hizo en su minuto como parte de las faenas».
«Esto siempre ocurre en las obras (…) esto se va a reparar, puede suceder de nuevo como pasa en todas las obras que tiene el Ministerio», acotó.
Sus declaraciones van en la misma línea de lo aseverado en un comunicado por la Dirección de Vialidad al detallar que «toda estructura de hormigón puede presentar pequeñas imperfecciones como fisuras, o nidos, oquedades, rugosidades superficiales. Es parte del proceso natural de una mezcla de hormigón que es el vaciado en un área confinada y una vez que se saca el moldaje quedan a la vista estas eventuales imperfecciones».
El Puente Chacao es uno de los mayores proyectos, en diseño y construcción, que se han llevado a cabo bajo la modalidad de contratación tradicional, a través de la Dirección de Vialidad del MOP; soportará vientos por más de 200 km/h, un sismo de a lo menos 9 grados en la Escala de Richter y será el primer puente colgante de grandes luces de vano, mayor a 1.000 metros, en Chile y en América Latina. Su vida útil estimada es de 100 años.
De acuerdo estimaciones financieras, ocasionaría ahorros para todo Chiloé superiores a los 800 millones de dólares por los próximos 45 años (sin considerar ahorros potenciales en peajes de cruzada), y que además vendría a complementar proyectos como la doble vía (ya en proceso de licitación) y el megapuerto en Quellón con una rentabilidad social del orden de los 500 mil millones de pesos para Chiloé y Aysén, entre otros.
En cuanto a los tiempos de cruce del canal, se espera que se reduzcan en 3 minutos en comparación a los 40 o 30 minutos actuales.
La idea del puente tiene alrededor de 50 años y se gestó gracias al ex diputado por Ancud, Castro, Quinchao y Palena don José Félix Garay Figueroa («El loco Garay») quien luchó desde el gobierno de Frei Montalva para que se pudiera construir la obra. Gracias a él, y con la venia de Salvador Allende, se promulgó la Ley n.° 17.591 un 29 de diciembre de 1971 que permitió que esta obra llegara a puerto.
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