Un impresentable resultado para la comuna de Queilen dirigida por el alcalde UDI Manuel Godoy es el que reveló recientemente el Consejo para la Transparencia (CPLT) tras realizar su cuarta fiscalización a las 53 Corporaciones Municipales del país respecto de su cumplimiento en materia de las exigencias de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública.
De acuerdo a antecedentes a los que accedió La Opinión de Chiloé, si el año 2015 la nebulosa en el uso de recursos ya era vergonzosa para la comuna con sólo un 39,79% de cumplimiento en los estándares de transparencia, este año tal porcentaje cayó estrepitosamente al 0% por un presunto «error de software», un error que durante meses no ha sido subsanado y que aparentemente, también ocurrió en 2014 cuando Queilen lideraba la oscura lista de municipios con Corporaciones menos transparentes del país.
En particular, según datos del CPLT, el ente queilino no presenta datos sobre su personal y las remuneraciones que reciben (0% de cumplimiento), las compras y contrataciones llevadas adelante están en la completa oscuridad (0% de cumplimiento), mientras que con respecto al presupuesto y su ejecución, el organismo fiscalizador constató un 0% de cumplimiento en el ámbito de la transparencia. Incluso, información tan básica como el Presupuesto 2016 no está disponible para la ciudadanía: de acuerdo a documentación que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, y cuya búsqueda fue extremadamente compleja, al menos se estimaba que en Educación y Salud se desembolsarían 3.034 millones de pesos este año, pero no se sabe en qué ni cómo se desglosan tales fondos (de manera detallada).
La revisión, efectuada en febrero pasado, abarcó a 53 instituciones: 45 fueron Corporaciones de Salud y Educación, 2 Corporaciones de Educación y 6 Corporaciones de Salud, Educación y Atención al Menor. En todas ellas, Queilen fue la peor con su 0%: por esta razón, hace pocos días se solicitó que la Contraloría General de la República que abra un sumario en contra de la Corporación, algo que ya había ocurrido con los resultados de 2014, por lo que esto no es nuevo para Queilen.
Lo extraño de todo es la explicación del mismísimo alcalde a un medio local, dado que aludió a un «problema de software». Sin embargo, consultado un Ingeniero Informático respecto a esta justificación, el profesional entregó una respuesta que no deja de sorprender: «no entiendo a qué se refiere el señor alcalde cuando dice eso, es bien simple, se suben los archivos al servidor que actualmente paga la Corporación, se coloca un enlace en la página de Transparencia Activa y listo, eso no te lleva más de 10 minutos (…) es raro que diga eso, si tampoco se necesita contratar a alguien para subir un archivo Excel, un pdf o un Word, eso lo puede hacer cualquiera con conocimientos básicos de computación, y la Corporación tiene personal competente (…) aunque ahora lo dudo».
Si se confirman estos incumplimientos, el alcalde Manuel Godoy podría arriesgar una multa que puede oscilar entre 1 millón y 2,5 millones, todo descontable de su remuneración. ¿Y los concejales? Eventualmente su rol fiscalizador es nulo dado los desastrosos resultados vinculados a la transparencia, índices que se repiten porque Queilen está de nuevo en esta lista negra.
Lo ocurrido representa otro golpe para la vapuleada Corporación Municipal de Queilen que preside el alcalde UDI dado que en diciembre de 2015 se confirmó una multa de 22 millones de pesos impuesta por la Superintendencia de Educación Escolar de la región de Los Lagos tras descubrirse que adulteraron documentación oficial para inflar la asistencia de los alumnos y con ello, el traspaso de dineros desde el Estado.
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