QUELLÓN (La Opinión de Chiloé) — Durante este miércoles se realizó el control de detención de un joven residente en Quellón quien fue aprehendido por funcionarios de la Sexta Comisaría de la ciudad puerto acusado del delito de microtráfico de drogas.
De acuerdo a antecedentes preliminares recopilados por La Opinión de Chiloé, el joven identificado como Gabriel Esteban Jara Nahuelquín (26 años) fue detenido por funcionarios policiales luego de ser sorprendido consumiendo bebidas alcohólicas en la Plaza de Armas en horas de la tarde, descubriéndose entre sus vestimentas sustancias psicotrópicas por lo que fue puesto a disposición de la justicia tras infringir la Ley n.°20.000.
Durante la audiencia de formalización de cargos, se decretó un período de investigación de 90 días además de las medidas cautelares de arresto domiciliario parcial, entre las 22.00 horas y las 06.00 horas del día siguiente, y arraigo nacional. ¿Por qué tales medidas cautelares gravosas? Jara Nahuelquín posee un enorme historial de causas donde ha sido sentenciado, formalizado y/o investigado por robo, desórdenes públicos, consumo de drogas en la vía pública, apuñalamiento, agresiones a mujeres, entre otras. La Opinión de Chiloé sólo se remitirá a exponer algunas de sus causas, y que han tenido lugar en la vía pública.
Así, esta no es la primera vez que es detenido en circunstancias similares, dado que el año pasado fue aprehendido al interior de una garita cerca del cruce Curanué consumiendo alcohol, mientras que en su vestimenta tenía 2,5 gramos marihuana; en esa oportunidad, fue multado.
En otra oportunidad fue puesto a disposición de la justicia cuando cerca de las 17.00 horas, y mientras transitaba por calle Ladrilleros hacia Presidente Ibáñez de la ciudad de Quellón, comenzó a propinar insultos y amenazas a todos los transeúntes que por allí pasaban, golpeando además la señalética. Tras ser controlado por Funcionarios Policiales en calle Pedro Aguirre Cerda, habría decidido abalanzarse sobre ellos intentando agredirlos. Tras varios meses, la Fiscalía decidió no perseverar.
Por otro lado, uno de los incidentes más graves ocurrió el 29 de abril de 2013, cuando cerca de las 6.30 horas de la mañana se encontraba bebiendo en plena Plaza de Armas. Ahí se generó una discusión con otro sujeto, procediendo a apuñalarlo en al menos dos oportunidades, una en el tórax y otra en el brazo izquierdo; afortunadamente el herido salvó providencialmente ya que al menos la herida en el pecho no alcanzó un órgano vital. En esa ocasión, el delincuente fue amonestado con una multa.
Días antes de tal ataque, el aludido propinó golpes de puños y patadas a su expareja al interior de una vivienda; la mujer, tras escapar del lugar, fue seguida por el aludido siendo alcanzada en calle Galvarino Riveros frente al internado de varones donde nuevamente la agredió con golpes de puño en su rostro dejándola prácticamente desfigurada, para luego escapar. En esa oportunidad, la mujer andaba en compañía de un pequeño de 2 años. Tras iniciarse las indagatorias, la Fiscalía tuvo que desistirse toda vez que la mujer no deseó continuar con la investigación.
Un dato curioso sobre su largo prontuario es el final de una sentencia a tres años y un día por robo en lugar habitado o destinado a la habitación mientras era menor de edad, dado que tras quebrantar la condena por escaparse desde Puerto Montt a Quellón, diversos trámites administrativos y judiciales permitieron que jamás la cumpliera íntegramente: el tiempo pasó y desde la defensoría penal pública se pidió la prescripción de la pena, la que fue aprobada en 2014.
Comentarios