QUELLÓN (La Opinión de Chiloé) — Gracias a la acción de vecinos se logró la captura de un sujeto que habría protagonizado un violento accidente de tránsito este domingo en el sector rural Curanué de la comuna de Quellón, y que dejó a un lactante herido de gravedad y a sus padres policontusos.
De acuerdo a información judicial que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, el Ministerio Público señaló que aproximadamente a las 19.30 horas de ese día, Gonzalo Antonio Chiguay Pairo (31 años) manejaba una camioneta en evidente estado de ebriedad, impactando a una pareja que iba con su pequeño hijo de apenas 8 meses de edad, resultando el infante con severas lesiones.
Tras ello, el imputado decidió escapar del lugar sin detener la marcha, ni dar cuenta del accidente de tránsito a autoridad alguna ni mucho menos prestar auxilio a las víctimas.
Sin embargo, fueron vecinos del sector quienes lograron interceptar al sujeto tras seguirlo procediendo a retenerlo a la espera de funcionarios policiales. Se encontraba a más de medio kilómetro del sitio del suceso en un camino lateral vecinal.
Carabineros de la Sexta Comisaría de Quellón asumieron el procedimiento deteniéndolo por su eventual participación en el ilícito. En ese marco, se constató que presentaba un fuerte hálito alcohólico, incoherencia al hablar y rostro congestionado, todo vinculado a un evidente estado de ebriedad.
El pequeño fue trasladado hasta el Hospital de Quellón, lugar donde se decidió derivarlo al Hospital Dr. Augusto Riffart de Castro debido a la complejidad de sus heridas; desde ahí, se optó por su envío al Hospital Regional de Puerto Montt en ambulancia.
Gonzalo Baeza, jefe provincial del Servicio de Atención Médica de Urgencia (SAMU), así lo confirmó precisando que su equipo lo transportó desde Quellón a la capital provincial «con una lesión en el cráneo importante, grave para un pequeño de esa edad, por lo cual se procedió a traslado hasta el Hospital de Puerto Montt».
Añadió que «por su gravedad y condición, se intentó primero un traslado aeromédico, por tiempo principalmente, siendo esta una patología tiempo-dependiente, pero se prefirió luego en ambulancia».
Sus padres resultaron con lesiones de carácter leve, por lo que luego de ser atendidos, fueron dados de alta. Sobre el imputado, ingresó a un recinto asistencial para constatar lesiones y practicarse la alcoholemia de rigor, para posteriormente ser puesto a disposición de la justicia.
Desde el Ministerio Público de Quellón, la fiscal Paulina Otero señaló que en el tribunal «[se] formalizó cargos a un conductor que estaba en estado de ebriedad, quien transitando por el sector de Curanué atropelló a una familia, entre ellos a un padre, quien mantenía en sus brazos a un menor de 8 meses, un lactante que cayó al suelo resultando con lesiones graves y el padre con lesiones leves».
El lactante quedó con una fractura craneana, aunque al cierre de esta nota ya había sido dado de alta.
Se le formalizó como presunto autor en grado de consumado del delito de conducción en estado de ebriedad con resultado de lesiones graves, lesiones leves con o sin daños, previsto y sancionado en el artículo 110 en relación con el artículo 196 incisos primero y segundo de la ley 18.290.
Se añadió la eventual comisión del delito de denegación de auxilio en accidente de tránsito del artículo 195 de la Ley de Tránsito, en relación al artículo 176 del mismo cuerpo legal.
En la audiencia, el juez de garantía José Milanca Sánchez accedió a imponer la medida cautelar de prisión preventiva, fundado en que resultaría indispensable para el éxito de diligencias precisas y determinadas de la investigación, añadiendo que la libertad del imputado constituye un peligro para la seguridad de la sociedad y que existe peligro de fuga.
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