QUELLÓN (La Opinión de Chiloé) — En un contundente fallo, los magistrados del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Castro procedieron a condenar a un adulto mayor por su responsabilidad en una serie de actos de connotación sexual perpetrados hacia una niña por varios años, y que era conocido por la víctima como su «tata».
De acuerdo a antecedentes judiciales que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, más allá de toda duda razonable se acreditó que Ernesto Barría (66 años), pederasta oriundo de Puerto Montt, realizó diversas tocaciones de carácter sexual entre los años 2003 al 2011 a una menor, develándose sólo en agosto de 2017 cuando la hoy adolescente se atrevió a contar lo ocurrido con su «tata» en su establecimiento educacional.
La Brigada Investigadora de Delitos Sexuales (Brisexme) de la Policía de investigaciones de Ancud estuvo a cargo de las indagatorias, determinándose que la víctima sufrió las vejaciones desde los cuatro años de edad; el sujeto cometía los ilícitos cuando visitaba a los padres de la niña en Quellón, ya que mantenía una relación de amistad con ellos.
El ahora condenado fue sentenciado por el delito de abuso sexual impropio, en carácter de continuado, a una pena efectiva de tres años y un día de presidio. La fiscal Karyn Alegría indicó sobre el fallo que: «es una pena muy buena ya que da cuenta de la pretensión de la fiscalía, y lo más importante es que es una pena efectiva».
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