TALCAHUANO (La Opinión de Chiloé) — Una ola de críticas transversales generó, durante las últimas horas, las declaraciones realizadas por el ahora ex Secretario Regional Ministerial (seremi) de Educación del Biobío, Héctor Aguilera Urrutia, quien minimizó y/o relativizó la denuncia de abuso sexual presentada por una niñita de quinto básico al interior de un establecimiento educacional de Talcahuano.
Los dichos de la otrora autoridad las hizo el día de ayer en una entrevista para radio RDI, luego de ser consultado por la denuncia de marras y las protestas que realizaron integrantes de la comunidad educativa del liceo La Asunción de Talcahuano. En dicha instancia, Aguilera respondió: «Se dice abuso sexual y la gente como que se imagina una situación altamente compleja. La situación que ocurrió fue que un estudiante se acercó a una menor y le hizo, lo que dicen, tocaciones…».
Posteriormente, agravó sus dichos al poner en duda el relato de la niñita asegurando que «según las conversaciones con la gente del establecimiento, no se pudo observar el hecho, solamente está la denuncia que hizo la estudiante», a pesar que la indagatoria no es materia del liceo, sino que de personal especializado de la Policía de Investigaciones de Chile.
«No le estoy bajando el perfil. Estas situaciones hay que averiguarlas y lamentablemente no tenemos las cámaras. No captaron la situación. Nosotros hemos dicho que en todo tipo de situación que ocurra en los establecimientos educacionales hay que llevar a cabo los protocolos que correspondan para determinar la veracidad completa», complementó Aguilera.
Tras ello, desde la Defensoría de la Niñez se refirieron a este tema a través de redes sociales, arguyendo que «nadie, menos aún una autoridad, puede relativizar una vulneración de derechos tan grave como un abuso sexual a un niño, niña o adolescente, que además es un delito claramente tipificado por ley».
«Declaraciones como estas no son aceptables y además provocan revictimización», agregaron desde el organismo.
Por otro lado, y a través de un video, el subsecretario de Educación, Nicolás Cataldo, aseguró que «como Ministerio de Educación condenamos los dichos de nuestro seremi de Educación en la Región del Biobío, pues somos parte de un Gobierno feminista y creemos que no se puede relativizar una situación de abuso sexual en une establecimiento educacional».
«En esa dirección, hemos recibido la renuncia del seremi de Educación del Biobío y con el ministro Marco Antonio Ávila, y siendo coherentes con nuestros principios, hemos decidido aceptar esa renuncia», explicó, aunque no detalló si dicha medida fue tras expresa solicitud del gobierno o fue decisión personal de la ahora exautoridad.
Cabe mencionar que durante esta mañana, el ministerio de Educación había emitido una declaración pública donde rechazó los dichos del seremi y recalcó que «el relato de las víctimas nunca debe relativizarse ni ponerse en duda».
«Como sociedad tenemos un gran desafío cultural. Debemos avanzar en la comprensión y concientización de la violencia de género y la vulneración de derechos que viven muchas mujeres, niñas, niños y adolescentes en nuestra sociedad. Esto es fundamental para avanzar en erradicar esta violencia de manera efectiva», indicó.
Por estos dichos, el Mineduc anunció que iniciará «un ciclo de formación sobre perspectiva de género y derechos de niños, niñas y adolescentes para las y los funcionarios, sobre todo para quienes se desempeñan en cargos directivos, de representación y atención de la comunidad educativa».
Sobre las medidas tomadas por las autoridades frente a la denuncia de la alumna, el ministerio informó que la Seremi de Educación del Biobío «entregó apoyo y orientación jurídica a la familia», sin ahondar en los dichos del titular, que a esa hora aún estaba en el cargo.
Junto con ello, el equipo ministerial participó de una mesa de diálogo con comunidad educativa del establecimiento para abordar esta lamentable situación y programar el retorno de las actividades académicas para este lunes 23 de mayo».
Del mismo modo, «la Superintendencia de Educación solicitó todos los antecedentes del caso al establecimiento e instruyó una fiscalización con el objetivo de esclarecer lo ocurrido y determinar si las acciones llevadas adelante por la directiva fueron las correspondientes de acuerdo con la normativa educacional».
Finalmente, el Mineduc cerró: «rechazamos y lamentamos todo tipo de agresión física o psicológica que afecte a niños, niñas y adolescentes, y cualquier situación vinculada con la vulneración de sus derechos, y mantenemos nuestro firme compromiso por la protección de sus derechos».
«Insistimos en la necesidad de avanzar hacia una formación integral y no sexista que permita evitar este tipo de vulneraciones. Seguiremos trabajando en acciones concretar que apunten a este objetivo», sentenció.
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