
VILLARRICA/CASTRO (La Opinión de Chiloé) — En medio del sostenido aumento de contagios en la comuna de Villarrica, región de La Araucanía, y que obligó a decretar cuarentena, durante este fin de semana se concretó al interior de la Unidad de Gestión Centralizada de Camas, un sigiloso traslado hacia la provincia de Chiloé de un paciente que se agravó tras presentar una neumonía por COVID-19 que supuestamente estaba en fase de recuperación.
Según las cifras disponibles durante este martes que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, Villarrica se alzaba con 320 casos de residentes pesquisados, de los cuales 81 se encontraban activos, mientras que a nivel de toda esa región, habían 936 pacientes que podían ser trasmisores con 102 que se encuentran hospitalizados, de los cuales 36 están en Unidad de Paciente Crítico, desglosándose en 12 para Unidad de Tratamiento Intermedio (UTI) y 24 para Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
Luego, la Seremi (s) de Salud, Gloria Rodríguez, reconoció durante las últimas horas que el sistema hospitalario de La Araucanía ha visto una evidente sobrecarga, afirmando que hasta el momento habían 16 pacientes conectados a ventilador mecánico, todos en la red pública de salud, mientras que de aquellos que ocupan camas críticas, en el reporte diario se mencionaba que existiría un varón que fue trasladado hacia Chiloé.
Así, fuentes consultadas por La Opinión de Chiloé consignaron que el paciente de 62 años de edad fue ingresado al Hospital Dr. Augusto Riffart de Castro tras ser trasladado desde el Hospital Dr. Abraham Godoy Peña de Lautaro.
Por ahora, el paciente villarricense se encuentra en estado de moderada gravedad y en la UTI del nosocomio castreño. Lo que se sabe es que habría presentado síntomas de la enfermedad por SARS-CoV-2 el pasado 16 de septiembre, agravándose con el correr de los días hasta que recién el 22 de septiembre fue testeado, dando positivo.
Dado su estado delicado de salud, fue internado para ocupar una cama crítica en el Hospital Dr. Hernán Henríquez Aravena de Temuco, presentando relativa mejoría que permitió derivarlo hacia el Hospital de Lautaro donde pasó a ocupar una cama básica desde el 30 de septiembre.
Sin embargo, posteriormente su equipo tratante constató que volvió a empeorar, requiriendo un nuevo traslado.
Así, el 3 de octubre se solicitó a la Unidad de Gestión de Camas Críticas un cupo para retornarlo a la UTI del Hospital Regional de Temuco, no habiendo disponibilidad. Aquí apareció como alternativa un espacio en Castro, que hasta el momento sólo tenía a otro paciente con COVID-19, aunque éste es residente en la capital provincial.
Luego, se coordinó su traslado ingresando durante la madrugada del sábado con un diagnóstico de un síndrome de dificultad respiratoria aguda derivada de una neumonía por COVID-19.
El paciente ha evolucionado bien, por lo que se espera que dentro de las próximas horas pueda ser cambiado a ocupar una cama básica, aunque por ahora el equipo médico se encuentra cauto.
Chiloé suma, en consecuencia, tres pacientes en UTI, ya que el villarricense se sumó a una residente del sector rural de Quetalmahue, Ancud, internada en el Hospital San Carlos de Ancud, y a un residente en Castro internado en el nosocomio de la capital provincial.
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