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Ancud: confirman que abuelo pederasta atacó sexualmente a dos niñitas por 3 años.
ANCUD (La Opinión de Chiloé) — A una pena efectiva de cárcel fue finalmente sentenciado un pederasta con residencia en la comuna de Ancud que al menos durante tres años agredió sexualmente a dos niñitas, y que había sido encontrado culpable en un juicio realizado la semana pasada.
Tal y como consignó La Opinión de Chiloé, tras la audiencia de juicio en el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal, los magistrados llegaron a la convicción que más allá de toda duda razonable, y que fechas indeterminadas entre 2015 y octubre de 2017, el delincuente identificado como H.V.V. (71 años), abusó sexualmente de ambas menores mientras quedaban a su cuidado.
Los hechos expuestos ante la justicia indican que los ilícitos se registraron al interior de un domicilio particular ubicado en la población Bellavista 3 de Ancud, dándose por acreditado que el pederasta fue autor, en diversas ocasiones, de actos de connotación sexual hacia ambas hermanitas, descubriéndose todo el cuarto trimestre de 2017.
El fallo detalla diversos comportamientos impropios del delincuente consistentes en tocaciones libidinosas hacia las víctimas, al menos desde que ellas tenían 5 y 7 años de edad.
Se detalló además que el sujeto tenía cercanía con la familia, y que tendría la calidad de tío político de ambas afectadas.
La indagatoria estuvo a cargo de detectives de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales y Menores (Brisexme) de la Policía de Investigaciones de Ancud, quienes lograron levantar una serie de medios probatorios que dieron cuenta de la dinámica de los hechos que permitieron una condena.
En tal marco, el Tribunal condenó a H.V.V. a la pena de 5 años y un día de presidio efectivo, en calidad de autor de dos delitos consumados y continuados de abuso sexual propio o directo de menor de 14 años de edad, descrito y sancionado en el artículo 366 bis del Código Penal.
El persecutor penal había pedido inicialmente dos penas de 7 años de presidio efectivos por los dos ilícitos alegando reiteración en el tiempo, pero al sólo poderse acreditar que fueron continuados, bajó sus pretensiones a 5 años por cada uno.
Desde la defensa en tanto, se pedía la imposición de 2 años de presidio por cada víctima, alegando irreprochable conducta anterior y colaboración sustancial en la investigación, aunque nunca reconoció nada.
En el fallo unánime, el tribunal –integrado por los magistrados Elías Agüero Matamala (presidente), Angélica Monsalve Vásquez y Rodrigo Alarcón Contreras (redactor)– aplicó una pena única de 5 años y 1 día, requiriendo que esta sea de cumplimiento efectivo.
Desde la Defensoría Penal Pública no se ha descartado recurrir de nulidad a la Corte de Apelaciones de Puerto Montt.
Además, el tribunal aplicó a H.V.V. las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para derechos políticos y la inhabilitación absoluta para cargos y oficios públicos durante el tiempo de la condena.
Asimismo, el condenado deberá cumplir las penas especiales de interdicción del derecho de ejercer la guarda y ser oído como pariente en los casos que la ley designa; la sujeción a la vigilancia de la autoridad durante los 10 años siguientes al cumplimiento de la pena principal, y la inhabilitación absoluta perpetua para cargos, oficios o profesiones ejercidos en ámbitos educacionales o que involucren una relación directa y habitual con menores de edad.
El tribunal, además, dictó la prohibición del sentenciado de acercarse a las víctimas, en cualquier lugar en que se encuentren, hasta la mayoría de edad de las niñas.
Una vez que el fallo quede ejecutoriado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas del sentenciado para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.
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