Chiloé: 23 esperan trasplante renal, 33 están en estudio y otros 60 en evaluación inicial

Fotografía: Servicio de Salud Chiloé.
Véase también:
Dalcahue: vecino muere tras caída; familia regaló vida respetando deseo de donar órganos.
Ciclista de Temuco fue quien regaló vida a niña de Dalcahue y a otras 4 personas.

SANTIAGO (La Opinión de Chiloé) — Al menos tres personas fueron las beneficiarias de la decisión de la familia de Santiago Guenchur Levicoy (56 años), más conocido como Santi por sus cercanos, quien el pasado 15 de noviembre falleció tras un desafortunado accidente que derivó en una muerte cerebral. En tal contexto, sus parientes optaron por respetar su decisión de donar su hígado y riñones, los que fueron procurados en el Hospital Dr. Augusto Riffart de Castro .

Con la finalidad de aumentar la tasa de donación el Ministerio de Salud ha emprendido diversas estrategias y campañas a lo largo del país, habilitando la posibilidad de procuramiento directo en Chiloé siendo el caso de Guenchur Levicoy.

Según estadísticas que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, en lo que va de 2019, se han realizado en el país 496 trasplantes de distintos órganos, de los cuales 43 pacientes recibieron un corazón, 20 pacientes un pulmón, 136 pacientes un hígado, 10 pacientes un páncreas y 287 pacientes un riñón. En Chiloé, una de las beneficiadas recientemente fue la pequeña oriunda de Dalcahue, Beatriz Dominguez Ampuero, quien accedió a un trasplante renal a fines de septiembre y hoy está en fase de recuperación (ver nota relacionada).

En cuanto a los que aún esperan, las cifras del Ministerio de Salud indican que a lo largo del país hay 13 personas esperando un corazón, 35 personas esperando pulmón, 104 personas esperando un hígado, 23 esperando un páncreas y 1.800 esperando un riñón.

En la provincia de Chiloé, y siguiendo la tendencia nacional, la mayor cantidad de pacientes que esperan un trasplante son los que necesitan un riñón. En particular, ya hay 23 personas en la lista de espera nacional, con 9 de ellos activos; a este grupo se suman otros 33 pacientes en estudio.

El Minsal indica que en lo que va del año, han habido 174 donantes en todo Chile con 496 beneficiarios. Sin embargo, la decisión final, explicó el director del Servicio de Salud Chiloé, Germán Echeverría, siempre recae en la familia, así que es muy importante conversar y sensibilizar a las personas que van a tomar la decisión aseverando que «no hay nada mejor que en momentos de dolor actuar con generosidad», en alusión a la familia de Santiago Guenchur Levicoy.

Neddiel Muñoz Millalonco, quien recibió un trasplante hace ya 11 años aseguró que «ví personas morir esperando. Yo estuve dos años en diálisis, no lo pasé bien, pero siempre tuve la esperanza de que sería la última diálisis. Como país nos falta información, la gente no sabe que no puede vivir con un solo riñón, hay que sensibilizar a las familias, yo tuve dos intentos de trasplante con mis hermanos, pero después el riñón llegó y soy una agradecida de la vida».

Beatriz Domínguez Ampuero, quien con 12 años recibió un riñón en septiembre pasado, aseguró que tras la cirugía: «ahí todo cambió. Ahora tomo un poco menos de medicamentos y estoy mejor. Ahora voy a poder hacer mi vida normal: podré ir al colegio, jugar, estar con mis amigos y con mi familia y me gustaría que la gente tomara conciencia y sea donante para ayudar a más personas que lo necesita para cambiar su vida».

Aseguró además que «doy mi ejemplo porque mi trasplante salió súper bien, en el hospital Calvo Mackenna me trasplantaron y apenas salí no tuve dolores, lo único que tuve era hambre, (ríe) así que me gustaría que la gente sea donante, porque cuando algún día uno ya no esté, una parte de nosotros pueda vivir en alguien más».

A pesar del dolor que significa la pérdida de un ser querido, la familia juega un rol fundamental en la determinación de cumplir con la voluntad que el paciente ha manifestado en vida y el deseo de ser donante.

Respetar la decisión es trascendental para dar vida a otros que se encuentran a la espera de un órgano. Así ocurrió hace unas dos semanas cuando José Guenchur, hermano de un donante de 56 años respetó la voluntad de ser donante de su familiar.

En esa instancia dijo «él siempre decía en vida que sería donante y, como hermano cumplí su deseo (…). Ojalá que sigan habiendo más personas que sean donantes, yo sólo estoy cumpliendo lo que me dijo él en vida, nada más que eso».

Negativa Familiar

En nuestro país la negativa familiar supera el 50% impidiendo el acto generoso de donar órganos de una persona fallecida a enfermos que lo requieren para prolongar su vida.

En el país, si bien las personas automáticamente se registran como donantes de órganos al menos que uno exprese lo contrario, son más de 4 millones que se declaran no donantes. Sumado a esto, se estima que durante el último año un 59% de las veces la familia decidió no respetar la decisión de los fallecidos y desechó donar.

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