DALCAHUE (La Opinión de Chiloé) — Varias indagatorias están realizando funcionarios de la Autoridad Sanitaria para ayudar a determinar las causas de una serie de emanaciones de amoníaco desde la planta Blue Shell ubicada camino a la localidad de Teguel, Dalcahue, y que habría dejado a varios trabajadores con síntomas de intoxicación. Se desconoce si la Dirección del Trabajo de Castro ha emanado algún informe tras apersonarse en el lugar para constatar las condiciones laborales existentes, algo que se dilucidará dentro de los próximos días.
De acuerdo a antecedentes preliminares recopilados por La Opinión de Chiloé, las emanaciones tóxicas se vendrían registrando desde el día domingo, sin que la empresa haya decidido paralizar las faenas a pesar que varios operarios habían debido ser atendidos en un centro asistencial con síntomas de intoxicación. Por ahora, estaría paralizada la línea de desconche (lugar donde estaría el problema), mientras que las dos líneas restantes están operativas tras permanecer paralizadas un par de horas.
El incidente habría ocurrido al comienzo del turno de noche cuando los operarios no pudieron ingresar a la planta, y por cerca de una hora estuvieron en la portería esperando para luego ser enviados al sector del casino mientras la empresa tomaba una decisión; a las 03.00 horas de la madrugada se les indicó que debían ingresar al área de proceso pero, al pasar algunos minutos, varios trabajadores comenzaron a mostrar problemas de salud como mareos y sangrado de nariz. Aparentemente, las instrucciones fueron seguir en el recinto ya que los medidores de amoníaco marcaban niveles normales, sin embargo, posteriormente se envió al personal con los síntomas de intoxicación al Cesfam Dalcahue y luego a la Asociación Chilena de Seguridad, ACHS.
Aunque las causas que habrían provocado las fuga se desconocen, se presume que el origen eventual sería la existencia de tuberías sin mantenimiento. La Autoridad Sanitaria fue alertada del hecho tras registrarse 11 personas atendidas en la ACHS de Castro; además, trascendidos indican que parte del sindicato «Fuerza Unida» también había denunciado lo ocurrido junto con la empresa que por ley, está obligada a reportar este accidente laboral.
Lo curioso es que desde la empresa se ha intentado minimizar lo ocurrido aseverando que las mediciones «sólo» alcanzaron un máximo de 20 partes por millón (la norma dice que el límite es 22 ppm), sin referirse por cierto a que tales niveles presuntamente «dentro de la norma» igual provocaron molestias y derivación a un recinto asistencial de 11 trabajadores. En este caso, el asunto no es menor dado que es un sumario abierto y se estarían adelantando conclusiones en menos de 48 horas; las medidas tomadas por Blue Shell estarán bajo la lupa los próximos días dado que podría enfrentar fuertes multas si se acredita algún tipo de negligencia.
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