Repartirán 9.500 canastas familiares de $50.000 en Chiloé ¿quiénes lo recibirán?

Fotografía de contexto.
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ISLA DE CHILOÉ (La Opinión de Chiloé) — Durante este miércoles el Consejo Regional de Los Lagos aprobó destinar para la Provincia de Chiloé un total de 475 millones de pesos con el objetivo de comprar y distribuir canastas familiares para los que serían los más golpeados por los efectos económicos de la pandemia por COVID-19, y que no perciben ingresos formales.

De acuerdo a antecedentes preliminares recopilados por La Opinión de Chiloé, serán beneficiados aquellos que estén inscritos en el Registro Social de Hogares y que sean clasificados entre el 40% y 70% más vulnerable de la población. Sería entonces para aquellos que no pueden trabajar, para trabajadores informales con alta vulnerabilidad social o dueñas de casa.

Se estima que el costo promedio por canasta familiar sería de $50.000.-, con lo que se adquirirán 9.500 unidades. Éstas serán coordinadas y priorizadas por cada uno de los municipios de la provincia.

Fuentes consultadas por La Opinión de Chiloé indicaron que si se considera la existencia de 71.558 viviendas en toda la provincia, entonces un 13,3% de ellas sería beneficiaria, siempre que la gestión de las municipalidades sea exhaustiva para evitar duplicidad y para no repetir los errores ocurridos en 2016 en medio de la crisis por la marea roja (algunos recibieron más de una canasta, otras desaparecieron, varias tenían alimentos en mal estado y algunas llegaron con «recortes»).

La proporción de viviendas beneficiarias por comuna será relativamente variable eso sí dado que en Quinchao por ejemplo, un 17,7% de ellas recibiría una, seguida por Castro con el 15,5% de las viviendas, y Puqueldón con el 14,7% de las viviendas; en contraste, la menor proporción de viviendas beneficiarias está en Chonchi (11,0%), Dalcahue (11,2%) y Quellón (11,6%).

Para precisar, las cajas serán repartidas entre aquellos que tengan ingresos informales o no tengan ingresos, vale decir, aquellas personas que no tengan algún contrato de trabajo, que no reciban pensiones (con excepciones), seguro de desempleo o cualquier otro ingreso tributable entre abril y septiembre de 2020.

Como es de esperar, el mayor número de cajas se encontrará en las comunas más grandes (Ancud, Castro y Quellón). El presupuesto por comuna y el número de canastas proyectado a entregar será:

Se estima que en el mes mayo podría comenzar la entrega, siempre que el proceso de compra no se dilate y el levantamiento de información sobre beneficiarios sea rápido.

Cabe reiterar que no lo recibirán aquellos que tengan trabajo con contrato u otro ingreso formal de cualquier naturaleza, tampoco jubilados ni menos aquellos que hayan quedado sin trabajo reciente que perciban seguro de cesantía durante los próximos tres meses en cualquiera de sus formas.

Además, se aclaró que si algún miembro del grupo familiar recibió Bono de Ingreso Familiar de Emergencia, entonces tampoco recibiría la canasta familiar. Si se incluiría a parte de los que accedieron al Bono COVID-19.

Ante la eventualidad de un alto número de personas que cumplan con todos estos criterios, se priorizará la distribución a las mujeres que realizan labores de pesca de orilla y recolección de mar, seguidas de personas sin ficha social, jefas de hogar con niños bajo su cuidado, familias que en los últimos meses estén sin cotizaciones, jefes de hogar de familias en campamentos, personal del transporte (público y escolares) que estén sin ingresos, casos sociales extremos con seguimiento municipal.

El Core Nelson Águila Serpa indicó que este beneficio no está vinculado a algún recurso adicional entregado por el gobierno, sino más bien se hace en base a diversas reasignaciones del presupuesto para este año.

Añadió a La Opinión de Chiloé que «el Gobierno Regional hará un instructivo para las municipalidades; la idea es que eso llegue a los más vulnerables (…). Eso lo están preparando en la División Social del GORE».

El Core Francisco Cárcamo secundó aquello asegurando que los municipios deberán levantar un catastro de potenciales beneficiarios para finalmente hacer la entrega de las cajas. Sobre este punto, Águila acotó que esperan que el reparto sea «lo más justo» posible.

Eso sí, particularmente en el caso de beneficiarios de la pensión básica solidaria de vejez o invalidez, aquellos pensionados AFP-IPS o que hayan quedado cesantes recientemente (con seguro de cesantía), la información debe ser precisada en el instructivo en comento, dado que eventualmente un porcentaje pequeño que está en extrema vulnerabilidad podría recibir canastas dependiendo de cómo se priorice la distribución.

A priori, estos grupos están descartados como beneficiarios directos porque tienen ya aportes estatales o apoyos por otras vías.

NOTA DE LA REDACCIÓN: El dato usado por La Opinión de Chiloé respecto a las 71.558 viviendas existentes en la Provincia se basa en el registro disponible en el Instituto Nacional de Estadísticas para el Censo 2017.

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