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Ancud: buscan a 70 personas que fueron a «curanto» con COVID-19 positivo.
ANCUD (La Opinión de Chiloé) — Controversia ha causado en la comuna de Ancud la confirmación de un pequeño brote de contagios por el virus SARS-CoV-2 en el sector rural Quetalmahue, al ingreso de la Península de Lacuy, y que estaría vinculado a una actividad social realizada en días pasados con una alta concurrencia de personas, y donde habría asistido un hombre de mar supuestamente violando una instrucción de cuarentena preventiva.
Tal y como consignó La Opinión de Chiloé, hasta el momento serían tres los casos circunscritos a este clúster o grupo, aunque durante las últimas horas se habría notificado a un cuarto, una persona que trabajaría como taxista informal.
A este respecto, fue la propia Seremi de Salud de Los Lagos, Scarlett Molt, quien aseguró que «el evento que vivimos en Quetalmahue, y que se asocia a este número de casos, fue un curanto que realizó un grupo de personas», precisando que estarían contabilizadas alrededor de 70 contactos estrechos.
Luego, la autoridad sanitaria expresó: «uno de los casos positivos habría estado incumpliendo la cuarentena preventiva ya que llegó desde afuera con una indicación de aislamiento», añadiendo que se iniciaría un Sumario Sanitario por las implicancias que hay detrás de su presunto actuar.
Fuentes independientes consultadas por La Opinión de Chiloé, y que prefirieron mantener reserva de su identidad, indicaron que la actividad fue la semana pasada a beneficio de una familia que había perdido su vivienda en un voraz incendio, y que efectivamente había concurrido una persona que más tarde dio positivo a COVID-19. ¿Era aquél con indicación de aislamiento?
La información preliminar aseguraba que el aludido, de 38 años de edad, habría concurrido presuntamente violando su cuarentena ya que ingresó a la isla proveniente de la región de Magallanes, lugar donde trabaja embarcado.
Sobre su caso, hasta ahora hay un PCR que se le habría tomado en el Laboratorio Biohealth de Puerto Natales, y cuyo resultado negativo se le entregó el día 16 de septiembre. Con tal antecedente, viajó a Ancud, arribando el 18 de septiembre con indicación de mantenerse en su domicilio.
Días después, el 28 de septiembre, su progenitora de 66 años de edad fue confirmada como portadora del virus SARS-CoV-2, posteriormente se notificó a un amigo de él que iba a su casa a ayudar a su madre en labores del campo, y luego el hombre de mar quien dio PCR positivo.
Además, fuentes independientes aseguraron a La Opinión de Chiloé que habría un cuarto contagio, el que se trataría de un vecino residente en el sector Quilo que trabaja manejando un taxi informal, algo que debe ser cotejado. Todos son casos cuya toma de muestras por PCR fueron posteriores al curanto.
Vistos estos datos, por ahora la trazabilidad no está del todo definida, existiendo una indagatoria epidemiológica aún en curso. Vale decir, aunque se presume que por haber provenido de una zona roja el arribado desde Magallanes sería el caso índice, ello no está confirmado.
Además, y respecto al curanto, varios vecinos del sector consultados por La Opinión de Chiloé aseveraron que el referido no concurrió, mientras que la beneficiada con la actividad solidaria, Camila Huaiquil Hernández, también reafirmó aquello profiriendo en medio de groserías por redes sociales que «asistió poca gente», desmintiendo tácitamente las cifras levantadas por los equipos de la red de salud.
También una funcionaria del Cecosf Quetalmahue puso en duda los datos de la Seremi de Salud. ¿Entonces quién fue el contagiado que en realidad concurrió? Habría sido el amigo ya mencionado.
Hay que acotar que tras la difusión de esta información donde Molt aludía a su pariente, fue la propia familia del trabajador quien salió a precisar algunas cosas, aclarando que en primera instancia sería falso que él haya abandonado su vivienda y violado la cuarentena preventiva para concurrir al curanto.
En conversación con La Opinión de Chiloé, una familiar directo, cuya identidad se resguardará, indicó: «se dice que él incumplió su cuarentena, lo que es mentira (…) se lo pueden preguntar a quienes quieran. Las personas que están haciendo este tipo de comentarios, son personas que no sé si no tienen criterio o no entienden la magnitud de las cosas, pero es algo muy grave, porque él en ningún momento infringió su cuarentena».
«Él la ha cumplido en su casa como corresponde», asestó, añadiendo que «jamás estuvo en el curanto (…) eso fue mentira, él jamás ha salido de su casa. Él estuvo encerrado con su madre. La persona que sí estuvo en el curanto es el joven (su amigo) que dio positivo, pero no es familiar directo, él estuvo en contacto con nuestra familia antes de que llegara mi hermano y un día después».
Aseguró que su pariente habría recibido visitas de personas quienes, a pesar de saber que estaba en aislamiento preventivo, aún así llegaban a verlo. A este respecto, reiteró además que «él nunca compartió con la gente que estaba en el curanto, no así el otro joven que habría sido enviado a una residencia sanitaria [tras dar positivo]».
«Yo quiero que se aclare esa situación», precisó, asegurando que se ha intentado contactar tanto con la Seremi de Salud de Los Lagos, como con los equipos de epidemiología para que se aclare «la equivocación que hay con este tema, porque se está haciendo una acusación de una persona en forma muy irresponsable».
«Pido a la Seremi de Salud y al alcalde de nuestra ciudad que por favor revisen esta situación, y que se indague realmente como corresponde porque se está inculpando a una persona con [algo] falso que no debería ser».
Por ahora este pequeño clúster tendría contagios en los sectores rurales de Quetalmahue y Quilo, no descartándose que aparezcan más casos en áreas circundantes como Puente Quilo, Taulín, Chucalén o Pilluco, entre otros, que podrían haber mantenido contacto con este foco.
Adicionalmente, la mujer de 66 años de edad mencionada en esta nota se encuentra internada en el Hospital San Carlos de Ancud ocupando una cama básica.
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