ANCUD/QUEMCHI (La Opinión de Chiloé) — Una insólita y riesgosa situación es la que lleva viviendo un vecino residente en la comuna de Quemchi que se encuentra hospitalizado en el Hospital San Carlos de Ancud, todo tras ser diagnosticado con una «obstrucción intestinal grave» y «megacolon», siendo requerida una cirugía de carácter urgente que aún no se concreta, con el consecuente riesgo a su salud.
De acuerdo a información preliminar recopilada por La Opinión de Chiloé, todo se habría gatillado el 16 de agosto de la semana pasada cuando el paciente, de 63 años de edad, fue derivado desde el Centro de Salud Familiar de Quemchi hacia el nosocomio de Ancud debido a una dolencia abdominal de origen incierto.
Fue ahí que tras varios exámenes y un lento proceso de diagnóstico, se determinó que padecía una obstrucción intestinal grave que requería una intervención quirúrgica de urgencia. La información indica que se les explicó a los familiares que el trasladado sería al día siguiente, y que sería al Hospital Dr, Augusto Riffart de Castro.
Sin embargo, luego de esa supuesta solución, una serie de aparentes violaciones a la Ley n.°20.584 se habría comenzado a observar al interior del Hospital de Ancud, todo tras constatar que la derivación a la capital provincial en las condiciones detalladas habría sido una mentira.
En efecto, mientras el cuadro del paciente seguía siendo calificado como grave, los días comenzaron a pasar y no se concretaba la cirugía: se les aseguraba a los familiares que no había pabellón o que no había camas u otras explicaciones, todos antecedentes que no tenían asidero en la realidad dado que en Castro los quirófanos están con baja tasa de uso, o sea, se usan poco.
A este respecto, María Bahamonde, hija del afectado, comentó en Chiloé News que insistentemente buscaron obtener una explicación del porqué su padre no era intervenido, recibiendo lo que sería un trato vejatorio en pleno recinto de salud por la que supuestamente era la médico tratante.
A este respecto, aseveró que de manera incomprensible, la funcionaria en comento se habría negado a entregar información sobre el estado del adulto mayor, para posteriormente eludir su rol y evitarlos, llegando incluso a decir que los domingos «no atendía consultas a familiares de pacientes», a pesar que estaba en turno y trabajando.
«Mi madre, mi hermano y el yerno de mi papá viajaron desde Quemchi a Ancud para saber qué estaba pasando (…) hablaron con la doctora que estaba a cargo y que se había negado en principio a hablar con los familiares… después de varios intentos la fueron a buscar al Servicio de Urgencia y lograron hablar con ella, claro que no de buena manera fueron recibidos», dijo.
Así las cosas, comentó que la médico acusó al Hospital de Castro de no querer recibir a su padre, que supuestamente allá era el lugar «que estaba poniendo problemas».
Junto con lo anterior, y de manera curiosa, esta profesional del Estado les habría lanzado que «no tenía porqué estar dándole explicaciones a la familia un día domingo», y sin entregar mayores explicaciones, no les dio ninguna solución o detalle de las gestiones que se estaban llevando a cabo para que la cirugía se hiciera: se habría desentendido.
La hija dijo que se tuvieron que volver a Quemchi, y por medio de varias consultas a conocidos que trabajan en Castro, éstos les habrían dicho que en realidad el problema era que el cirujano estaba de vacaciones sin reemplazo, y que todos estaban encubriendo dicha situación anómala.
«En realidad el problema no era ni por falta de camas ni de pabellón, sino que los médicos tienen sus vacaciones, tienen también licencias médicas, pero no contratan a otro especialista como para reemplazar ese vacío que queda cuando ellos no están», afirmó la fuente.
Vale decir, se estaba esperando que el médico especialista que operaría al paciente termine sus vacaciones, generando una enorme interrogante entre sus familiares: ¿y si el adulto mayor comenzara a sufrir una necrosis del intestino o una infección generalizada?
Existiría una instrucción expresa del Director del Servicio de Salud Chiloé, José Cárdenas, para que no se busque un reemplazo con el fin de no generar gastos extraordinarios al servicio, todo en medio de una millonaria deuda que mantiene esta repartición tras una de las peores gestiones financieras de su historia en medio de mediocres indicadores de resolutividad con listas de espera históricas y una caída estrepitosa de cirugías concretadas.
Tras conocerse el caso, el Subdirector Médico del Hospital de Ancud, Rodrigo Solís Chávez, salió a señalar que desde el mismo día miércoles se había comenzado a gestionar la derivación del paciente hacia Castro, lo que recién ocurriría durante el día de hoy martes, sin explicar pormenorizadamente el porqué la médico tratante tuvo el trato vejatorio denunciado por los familiares, ni tampoco porqué se demoraron tanto en diagnosticar y proceder a trasladar.
«En todos los casos que requieren una atención médica que nuestro hospital no es capaz de brindar, se suben a una plataforma que se llama Unidad de Gestión de Camas y que nos permite a nosotros trasladar al paciente que necesite cierta resolución para su mejoría a otro establecimiento», dijo.
«En este caso, Castro tiene las competencias para resolver esta situación y se nos ha confirmado que nosotros vamos a trasladar al paciente mañana martes 24 de agosto al Hospital de Castro y el día jueves tiene programado un cupo para resolución quirúrgica», explicó el facultativo. No ahondó más.
Para poner en perspectiva, cabe precisar que las obstrucciones intestinales graves pueden tener complicaciones severas que pueden llevar hasta la muerte. En algunas ocasiones, puede bloquearse el flujo sanguíneo hacia el intestino generando necrosis haciendo que el tejido intestinal se muera y deba ser removido, en otras el contenido del intestino podría volver hacia el abdomen, o también podría generar una irritación o infección de la cavidad abdominal que podría afectar otros órganos.
Todos los problemas anteriores no incluyen la sintomatología asociada como fuente dolor, fiebre, náuseas y vómitos, deshidratación, y malestar general, entre otros.
Comentarios