ANCUD (La Opinión de Chiloé) — A la espera de la evolución del estado de salud de un conductor se encuentra el Ministerio Público de Ancud, todo luego que durante este domingo protagonizara un violento accidente de tránsito rumbo al sector rural Lechagua, dejando al menos tres personas lesionadas, dos de ellas graves, siendo él uno.
De acuerdo a información preliminar recopilada por La Opinión de Chiloé, las alarmas de emergencia se activaron alrededor de las 11.00 horas de la mañana cuando, por circunstancias que están siendo investigadas, el conductor de un vehículo menor perdió el control de su móvil en la zona oeste del radio urbano, volcando violentamente sobre la vía.
Los detalles iniciales señalaban que un automóvil Toyota Yaris XLI patente FDWT-42 habría andado a una velocidad poco prudente por toda la Costanera, y al avanzar por la ruta hacia Lechagua, protagonizó este siniestro frente a la población Cardenal Raúl Silva Henríquez.
Voluntarios del Cuerpo de Bomberos de Ancud fueron despachados al lugar para prestar auxilio a las víctimas, sumándose dos ambulancias del Servicio de Atención Médica de Urgencia (Samu) y Carabineros de la Primera Comisaría, encontrándose con tres heridos de diversa consideración, dos de ellos graves.
En efecto, personal de socorro encontró en medio de la pista a dos jóvenes de aproximadamente 21 años de edad en muy malas condiciones, mientras que dentro del automóvil estaba una tercera joven con diversas contusiones.
Fuentes consultadas por La Opinión de Chiloé indicaron que los dos varones habrían salido eyectados producto de la violencia de este accidente, y que se vincularía, principalmente, a que el conductor estaba conduciendo a una velocidad poco prudente y con ingesta previa de alcohol.
A este respecto, minutos antes de informarse sobre esta emergencia, el mismo móvil fue captado por transeúntes en pleno centro de Ancud realizando maniobras a alta velocidad por diversas arterias, incluyendo calle 18, Avda. Pedro Montt, Avda. Arturo Prat y Avda. Salvador Allende (Costanera), entre otras, todas altamente concurridas durante los días de semana hábiles.
Cabe mencionar que la dinámica de lo que pasó es materia de investigación, pero la hipótesis más plausible indica que el chofer estaba incapacitado para manejar producto de ebriedad manifiesta.
Este antecedente habría sido corroborado a nivel clínico tras la imposibilidad de una prueba respiratoria in situ: el imputado fue encontrado en estado grave en la calle.
Tanto él como su copiloto fueron auxiliados en la misma calzada para ser estabilizados y trasladados hacia el Servicio de Urgencia del Hospital San Carlos de Ancud, algo que se replicó con la tercera ocupante, que aparentaba estar ilesa.
Luego, mientras el segundo joven fue diagnosticado con una fractura en una de sus extremidades superiores, contusiones y algunas heridas superficiales en una de sus rodillas, el primero habría entrado en coma y tendría diagnóstico reservado al cierre de esta nota.
El comisario de la Primera Comisaría de Carabineros de esa ciudad, el mayor Marcelo Bahamonde, confirmó la información, asegurando que «alrededor de las 11.00 de la mañana, en la Ruta W-200, a la salida de Ancud hacia el sector de Lechagua, hubo un volcamiento de un vehículo Toyota Yaris que generó que de los tres ocupantes, dos de ellos resultaran con lesiones de carácter grave».
Agregó que el chofer «lo hacía en estado de ebriedad por la apreciación clínica», explicando además que junto a uno de sus acompañantes, «ambos hombres de 21 años, salieron eyectados del vehículo al momento del accidente», siendo derivados al centro asistencial local.
Sobre la mujer que los acompañaba, precisó que «ella logró mantenerse en el interior», y que tendría lesiones leves.
La Fiscalía local de Ancud abrió una causa penal para dilucidar lo que pasó, caratulándose inicialmente el caso como un eventual delito de conducción de vehículo motorizado en estado de ebriedad con resultado de daños, lesiones graves y lesiones leves, descrito y sancionado en el artículo 196 con relación al artículo 110, ambos de la Ley de Tránsito.
Dado que el imputado está hospitalizado, quedó apercibido a la espera de su evolución clínica para enfrentar una potencial formalización.
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