Ancud: avanza nuevo cuartel de bomberos en Bonilla por $940 millones. Será para la 3a. Compañía

Fotografía: nuevo Cuartel para la Tercera Compañía del Cuerpo de Bomberos de Ancud.
Véase también:
Ancud: dan el vamos a proyecto de cuartel de Bomberos en Inés de Bazán.

ANCUD (La Opinión de Chiloé) — Satisfacción y optimismo existe tanto en el Cuerpo de Bomberos de Ancud como en la Ilustre Municipalidad de Ancud tras conocerse que durante este viernes, el Ministerio de Desarrollo social otorgó la recomendación satisfactoria (RS) al proyecto de un nuevo cuartel bomberil, y que permitiría avanzar en el plan de descentralización de esta centenaria institución.

Tal y como consignó La Opinión de Chiloé, desde hace varios años existe un proyecto que pretende la construcción de dos nuevos cuarteles en distintas partes del radio urbano de Ancud —Bonilla e Inés de Bazán—, siendo el que avanza a paso raudo el correspondiente al primer sector.

Si bien es cierto en octubre de 2019 se había anunciado el inicio de gestiones para levantar un nuevo cuartel en el sector Inés de Bazán para la Segunda Compañía, durante este viernes se confirmó que se da un avance significativo para la otra propuesta que implica una nueva infraestructura que ocuparía la Tercera Compañía en el sector Bonilla, adelantándose a su vecina.

Así las cosas, esta unidad bomberil —que desde 1872 se emplaza en las dependencias generales frente a la Plaza de Armas— sería la primera que se trasladaría fuera del centro de Ancud. Es la más avanzada.

Según la información disponible en el Banco Integrado de Proyectos del Sistema Nacional de Inversiones (SNI), el monto que se postuló alcanzaría una suma total de $939.619.000.000.-

Luego, de este monto, alrededor de $893 millones estarán destinados a la construcción propiamente tal, alrededor de $13 millones en equipamiento, otros $11 millones en equipos y alrededor de $22 millones en consultorías.

En este sentido, se contempla la construcción de una infraestructura de 2 pisos, con un total de 507,52m² de superficie, el que se levantará sobre un terreno que fue facilitado en comodato por la I. Municipalidad de Ancud al cuerpo de bomberos, y que corresponde a una superficie de 1.051m² aproximadamente.

En un primer piso contempla un hall de acceso, baños , oficinas, sala multiuso, sala de estar, cocina, sala de máquina, lavadero industrial, y baños de descontaminación.

En un segundo nivel se contempla otro hall, sala de estudio, y el sector destinado a la guardia nocturna que considera sala de estar, dormitorios para hombres y mujeres, baños y cocina.

La idea de esta nueva infraestructura tiene una génesis que se remonta a varias décadas, remontándose a alrededor de la década de 1960 cuando se planteó por primera vez la idea de iniciar una descentralización de las instalaciones que posee esta centenaria institución.

El tema durmió por bastante tiempo debido a que las particularidades de la ciudad hacían que los tiempos de respuesta ante emergencias estén dentro de rangos manejables, mientras que los extremos del radio urbano no ocasionaban mayores complejidades de traslado de las unidades.

Cuando en 1949 se decidió levantar el actual cuartel general (tras el incendio del Teatro La Bomba el 16 de julio de ese año), parecía lógico seguir con todas las compañías en el centro, más aún cuando la mayoría de las grandes emergencias en Ancud se daban precisamente en el área circundante.

Sin embargo, la expansión de la ciudad durante los últimos 20 años ha cambiado tal lógica de emplazamiento, fortaleciendo los proyectos de Bonilla e Inés de Bazán.

Varias décadas después de la idea de 1960 —a comienzos de 2010— el proyecto volvió a reactivarse, mencionándose que se estaba en gestiones para los diseños que iban a incluir las normas posteriores al terremoto de ese año, indicándose además que la fecha tentativa para la postulación de esta iniciativa (y la de Inés de Bazán) podría ser en 2011 según el alcalde de esa época, Federico Krüger. Bonilla logró recursos para su diseño en 2016 (alrededor de 45 millones) e Inés de Bazán va más atrás.

¿Qué significa en términos concretos el RS?

En el SNI siempre es posible identificar cinco tipos de resultados tras realizar un análisis técnico económico de un proyecto: RS, FI, IN, OT y RE. El primero es recomendado favorablemente (RS), el segundo indica falta de información (FI), el tercero señala incumplimiento de la normativa (IN), el cuarto objetado técnicamente (OT) y el quinto indica que el proyecto está en reevaluación (RE).

En base a lo anterior, la calificación de RS (Recomendado Favorablemente) significa que el proyecto para esta etapa recién cumple con la condición de haber sido presentado al SNI con todos los antecedentes y estudios que demuestran que para la solución del problema se ha seleccionado la alternativa que ha demostrado la conveniencia de llevar a cabo la iniciativa postulada.

Para precisar, el RS ahora permite solicitar recursos para las licitaciones correspondientes y concretar la iniciativa, por lo que el paso siguiente sería la búsqueda de fondos en el Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR). 

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