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Impacto en Ancud: 2 funcionarias PDI acusan agresión sexual. Colegas no las habrían ayudado,
ANCUD (La Opinión de Chiloé) — Un enorme revuelo en la comunidad chilota ha causado una indagatoria al interior del cuartel de la Policía de Investigaciones de Ancud respecto a hechos que podrían ser constitutivos de algún tipo de delito sexual, y que tiene como eventual perpetrador a un detective y como víctimas a dos de sus colegas.
El caso, que se había mantenido en secreto, fue revelado por La Opinión de Chiloé durante este lunes, sindicándose que todo habría ocurrido en dos convivencias sociales realizadas en una residencia arrendada por el jefe de la unidad en pleno centro de la ciudad, actividades donde no sólo asistieron las afectadas y el imputado, sino que también varios funcionarios en servicio activo de la PDI que habrían tenido conocimiento de lo ocurrido sin intervenir a tiempo.
Hay que precisar que, como se viene diciendo, los antecedentes preliminares contabilizarían dos ataques de índole sexual donde estaría como perpetrador el mismo detective, aunque en fechas distintas y en dinámicas relativamente similares.
El primer hecho se habría registrado el 30 de diciembre de 2021, mientras que el segundo, el pasado jueves 20 de enero de 2022.
La primera denuncia eso sí provino de la afectada en la última actividad social, trascendiendo que en medio de la ingesta alcohólica, y en una hora indeterminada, uno de los detectives —que sería íntimo amigo del dueño de casa—, presuntamente la agredió usando la fuerza.
Aunque por ahora no se ha querido hablar de una violación en grado de tentado o frustrado, si se alude a tocaciones de carácter sexual y el intento de desnudar a la víctima, terminando en un forcejeo luego que la mujer se defendiera para escapar semidesnuda a la vista de varios de los asistentes, quienes no la habrían auxiliado a pesar de la flagrancia.
La mujer decidió informar a la brevedad a su jefatura directa, asegurando que el responsable sería el detective identificado como A.A.
Tras ello, y conocida la denuncia interna realizada por la afectada, una segunda detective se atrevió a acusar al mismo colega por actos similares, los que habrían ocurrido en la misma vivienda arrendada por el jefe de la unidad, y en medio de otra actividad social.
Aparentemente, esta segunda detective no había querido denunciar por temor a represalias ya que el presunto implicado tendría fuertes lazos de amistad con el jefe; sin embargo, al enterarse de lo que le pasó a su compañera, decidió dejar de guardar silencio.
Si bien es cierto al interior del cuartel ya se habría sabido todo desde al menos este viernes, no hay registro del ingreso de alguna denuncia o medida en contra del virtual implicado, mientras que las afectadas decidieron por cuenta propia interponer una denuncia directamente a Fiscalía este domingo.
Tras ello, recién se comenzaron a observar algunas acciones ante el inminente escándalo que se desataría, entre ellas, el inicio de un sumario administrativo para determinar responsabilidades, aunque todo se ha mantenido bajo completo hermetismo.
A este respecto, y luego que La Opinión de Chiloé expusiera el caso ante la opinión pública, la Policía de Investigaciones se vio obligada a emitir un escueto comunicado señalando lo siguiente:
1.- «Conocidos los hechos, la institución instruyó un acto administrativo para determinar fehacientemente las circunstancias en que se produjeron y establecer eventuales responsabilidades en este ámbito, ordenando, en forma paralela, la suspensión de sus funciones del citado funcionario.
2.- «Asimismo, se pusieron a disposición del Ministerio Público todos los antecedentes, entregando apoyo a las afectadas.
3.- «Cabe señalar que la PDI no ampara situaciones de esta naturaleza y reitera a la opinión pública su irrestricto compromiso con la sociedad y apego al Estado de Derecho».
Cabe mencionar que sobre el posible apoyo a las afectadas, fuentes independientes consultadas por La Opinión de Chiloé no han podido confirmarlo debido a la existencia de antecedentes que acusan una aparente pasividad no sólo de los asistentes a las actividades sociales mencionadas, todos funcionarios activos de la institución, sino que también, de las jefaturas del mismísimo cuartel.
Es más, sobre los hechos que habrían ocurrido este jueves, no hay registro respecto a alguna diligencia instruida por la PDI de Ancud para aprehender en flagrancia al detective mencionado en la denuncia.


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