CASTRO (La Opinión de Chiloé) — Durante las últimas horas, quien ocupaba el cargo de Director del Hospital Dr. Augusto Riffart de Castro, José Francisco Ricaurte Mendoza, presentó su renuncia indeclinable al puesto luego que no pudiera superar diversos problemas con el nuevo Director del Servicio de Salud Chiloé, Germán Echeverría Prieto, quien asumió funciones en septiembre de 2019 tras un «poco ortodoxo» concurso de Alta Dirección Pública, donde fue elegido a pesar de no tener experiencia alguna en centros de salud pública en desmedro de otros candidatos con amplia trayectoria.
En particular, Echeverría Prieto asumió con el título de Licenciado en Matemáticas y Computación en medio de las peores cifras de la historia de Chiloé en las listas de espera, con un total de 24.141 interconsultas de especialidad pendientes no AUGE-GES, cirugías y garantías de oportunidad GES retrasadas, sumándose también una eventual manipulación en el número de cirugías realizadas en la provincia toda vez que en un reportaje de La Opinión de Chiloé se expuso que un 20,6% de las solicitudes fue sacada de las listas de espera sin haber recibido cirugía alguna, cifra que aumentaba a 25,5% en el Hospital de Castro (ver nota relacionada).
Pues bien, a través de una carta, el ahora renunciado Director del nosocomio de Castro le dijo al Director del Servicio de Salud Chiloé que «desde su llegada a nuestro Servicio de Salud, y a pesar de nuestras reiteradas invitaciones para reunirnos, en un principio en nuestro Hospital Base, con la intención de que conozca de primera fuente detalles del funcionamiento del centro asistencial más importante del Servicio, sólo fue posible concretar la mencionada visita el día en que, según sus propias palabras, la Gobernación Marítima suspendió una reunión ‘protocolar’ que usted habría generado con ellos en sus dependencias».
Añadió que «tras esta improvisada visita no ha existido por su parte comunicación, de ningún tipo, que busque tratar temas relacionados con las problemáticas de salud de nuestra comunidad«.
Aseguró además que «la relación establecida, hasta el momento, ha sido básicamente epistolar, en la que ha quedado de manifiesto su desconocimiento del marco regulatorio que nos rige, en particular el de los Establecimientos Autogestionados en Red…»
Arguye en este marco que el nuevo encargado de la salud provincial «ha generado instrucciones que rayan en lo legal, haciendo exigencias que están fuera de su competencia y que son muy discutibles, como por ejemplo la orden que dio de que todos los contratos del Hospital serían visados por su persona, previo al acto administrativo, lo que evidentemente es imposible, dada la carga laboral que esta instrucción generaría y, además, evidentemente lo distraería de sus funciones».
Añade el renunciado directivo que «a lo anteriormente señalado se suma la inequidad que ha demostrado en el manejo del recurso humano, ya que las medidas administrativas acordadas con los gremios de otros hospitales no corresponden a las instrucciones impartidas a nuestro hospital ni a las entregadas por el Ministerio».
Luego, acusó que aquello «ha favorecido una paralización de uno de los hospitales de la red, sin que usted genere ninguna coordinación siquiera, tendiente a asegurar las atenciones de salud de urgencia de los beneficiarios».
Continúa diciendo que «su desconocimiento del ámbito de la salud es tan grande que marginó de su equipo de trabajo al Subdirector Médico del Servicio de Salud, Dr. Luis Ferrada Christie, salubrista connotado, quien es la persona que tiene el mayor conocimiento y experiencia en el ámbito de gestión clínica en la provincia, y que, además, luchó por varios años por crear y desarrollar el Servicio de Salud que usted dirige hoy, aduciendo que necesitaba contar con un profesional por 44 horas semanales y colocando en su lugar a un médico EDF cuya experiencia en gestión se limitaba a ser directivo de un Hospital Comunitario de 4 camas«.
Indica que «todas estas situaciones fueron alertadas a relaciones laborales del Ministerio y a la Subsecretaría del MINSAL, sin que se genere ningún tipo de respuesta».
¿De quién hablaba? Del médico Jorge Rodrigo Contreras Aguilera, quien efectivamente reemplazó a Ferrada, y que posee una bastante acotada experiencia en el ámbito de gestión de establecimientos de salud aunque eso sí, antes de asumir, tuvo visibilidad como dirigente gremial. Es el mismo quien dio la noticia del falso sospechoso de coronavirus registrado en Puqueldón.
Finaliza diciendo que renuncia «porque han resultado vanos los esfuerzos por gestionar en miras a una salud de calidad y a pesar de que mi compromiso por la salud de Chiloé permanece intacto, (…) ya que no puedo ser parte del grupo directivo que hará que se pierda lo que se había avanzado, dañando la mal trecha salud de nuestra población chilota, hasta su lamentable llegada».
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