ANCUD (La Opinión de Chiloé) — Satisfacción existe al interior del Hospital San Carlos de Ancud luego que durante la semana pasada se concretaran cuatro exitosas cirugías maxilofaciales a pacientes del Archipiélago, quienes desde su nacimiento presentaban diversas anomalías en sus rostros que requerían intervenciones quirúrgicas.
De acuerdo a antecedentes recopilados por La Opinión de Chiloé, las cuatro cirugías ortognáticas se llevaron a cabo los días jueves 8 y viernes 9 de octubre, participando los cirujano-dentistas con especialidad en Cirugía y Traumatología Bucal y Maxilofacial Rodrigo Bravo Rodríguez y Rodrigo Fariña Sirandoni, quien además tiene un fellow en cirugía plástica de la cara.
«Fue algo nuevo en la provincia, nunca se había realizado. Consisten en llevar los maxilares a su posición correcta, en pacientes que tienen —por ejemplo— asimetrías faciales o alteraciones esqueletales de su rostro. Con esta cirugía logramos la posición ideal de los maxilares devolviendo una correcta función y estética en nuestros pacientes», aseguró Bravo.
Rodrigo Solís Chávez, Subdirector Médico del Hospital de Ancud quien además es cirujano-dentista y especialista en Odontología Restauradora con mención en prótesis estomatológica, se mostró satisfecho con las intervenciones asegurando que «para nosotros es un sueño logrado, ya que se venía planificando hace dos años con estos pacientes».
Agregó que «nuestros cirujanos están capacitados para realizar una cirugía ortognática, pero para estas intervenciones se requiere la participación de tres cirujanos maxilofaciales, por lo cual se solicitó el apoyo de otros especialistas en la materia». Con ello puso énfasis en que la infraestructura y recurso humano en el Hospital San Carlos de Ancud existe para realizar cirugías complejas, por lo que sería la falta de especialistas lo que entramparía su masificación.
El especialista Rodrigo Bravo explicó, grosso modo, los cuatro casos que se abordaron en los quirófanos del Hospital de Ancud.
El primero poseía una anomalía facial con fisura alveolo palatina, lo que generó alteración de su crecimiento cráneo facial. Y hoy a sus 18 años tuvo la última cirugía de todo un largo proceso. «Hicimos cirugía ortognática más una rinoplastía. Tuvimos que reconstruir su maxilar con injertos óseos, hacer la rinoplastia y llevar su maxilar hacia adelante. Fue un proceso complejo y largo, pero obtuvimos resultados muy buenos, el paciente quedó contento», comentó el especialista.
Otra paciente tenía su maxilar en una posición posterior, que denotaba aspecto de una mandíbula prominente. Un tercero presentaba también prognatismo mandibular asimétrico, en otras palabras, el mentón hacia un lado. Sus maxilares fueron llevados a la posición correcta para devolverles así la armonía facial.
La última paciente requirió una técnica denominada de distracción osteogénica. «Se hizo los cortes y pusimos un aparato (distractor intraoral) que permitirá ir elongando su maxilar en el tiempo, que producirá no solo alargamiento del hueso, sino también de los tejidos blandos. Son técnicas que nunca se habían realizado en la provincia y esperamos sean las primeras de varias, para dar solución a nuestros pacientes que requieren estos procedimientos», relata Bravo.
El especialista Rodrigo Fariña señaló que «me parece una experiencia colaborativa fantástica. Esta cirugía ortognática es primera vez que se hace en la isla, es el puntapié inicial para desarrollar técnicas que pueden ser aun más complejas».
Resaltó además que el recinto hospitalario ancuditano posee el recurso humano y técnico para desarrollar estos procedimientos. «Están las competencias; es una cirugía que se hace generalmente con tres especialistas de este tipo. Pero desde el punto de vista técnico, competencias, instrumental y salas de complejidad, perfectamente se puede realizar acá», dijo.
Resolver este tipo de casos supone un enorme cambio para las personas. «Cuando la gente no tiene acceso a la solución tiene que quedarse con el problema toda la vida. Muchos no saben que existe una alternativa de tratamiento y quedan sin tratarse, con trastornos emocionales, funcionales, problemas respiratorios, de masticación, que están asociados a estas alteraciones. Por eso la cirugía se realiza entre los 15 o 20 años, porque cambia la calidad de vida, también lo psicológico», planteó el especialista, quien además es Presidente electo de la Sociedad de Cirugía Maxilofacial de Chile.
Uno de los pacientes intervenidos fue el joven J.G. (18 años), quien en plena etapa de recuperación aseguró: «nada qué decir, todo ha sido muy bueno. He tenido operaciones anteriores, pero ésta ha sido muy poco dolorosa, todo bien cuidado. Del año pasado preparaba esto. La atención ha sido espectacular, el doctor Bravo y sus colegas han sido todos muy atentos».
El Director del Hospital de Ancud, José Cárdenas Burce, agradeció a todo el equipo que hizo posible las intervenciones. «Felicito a quienes coordinaron, gestionaron y ejecutaron estos procedimientos. Esto demuestra una vez más que el trabajo en equipo es fructífero, cuando nos unimos para entregar una prestación segura y de calidad a nuestros pacientes, quienes son nuestro foco final y el más importante», dijo.
Bravo aseguró que «esto es un largo camino, todos estos pacientes antes de operarse tienen que ponerse frenillo, por ejemplo. Hay un trabajo no solo de Cirugía, nosotros hacemos la parte final, pero en Pabellón se desarrolla una tarea de equipo; la anestesia no es fácil en estos pacientes».
«Cuando hablamos de recursos, en el Pabellón tenemos todo para hacerlo. Contamos con el respaldo de la Dirección, del equipo de Enfermeros, de TENS. Es un trabajo multidisciplinario que nos permite llegar a este resultado», expresó, manifestando su anhelo de continuar desarrollando la cirugía maxilofacial en el recinto asistencial.
Finalmente, el Subdirector Médico del nosocomio, Rodrigo Solís, sostuvo que los cuatro pacientes intervenidos evolucionaron bien, con post-operatorios esperados y sin complicaciones.
«Esperamos tener la capacidad como red de Salud Chiloé para resolver dentro de la isla cada vez que tengamos estos casos clínicos. Para estas cuatro personas es un gran cambio, por eso estamos todos contentos: sus familias y equipos de salud. Trabajar tanto tiempo y ver los resultados tras las cirugías, emociona y da satisfacción», recalcó el cirujano-dentista y actual directivo.
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