WASHINGTON (La Opinión de Chiloé) — La revisa Forbes destacó, una vez más, a la Presidenta Michelle Bachelet dentro de las mujeres más poderosas en el planeta. Este año, es catalogada como la cuarta mujer más poderosa del mundo en política sólo siendo superada por la canciller alemana, Angela Merkel, la primera ministra británica, Theresa May, y la presidenta de Taiwán, Tsa Ing-Wen.
La presidenta es la única latinoamericana presente en la lista y es destacada por las profundas reformas que ha llevado adelante en el país durante su segundo período de gobierno, no estando exenta de críticas, muchas de ellas caracterizadas por campañas comunicacionales que han tenido poco eco a nivel internacional; es más, una parte significativa de los que critican su administración se cuentan entre los millones de chilenos que disfrutan de algún beneficio del Estado sin mayores alzas en la carga impositiva. De hecho, y según el Banco Mundial, solamente 12 mil personas son las que pagan el 73% de todo lo que se recauda la tan comentada Reforma Tributaria, mientras que el 93% de todo lo que se recauda es pagado por el 1% más rico de todo Chile (ver nota relacionada).
Bachelet ha realizado una serie de reformas en el país en poco menos de cuatros años, destacando una de las revisiones al sistema tributario más amplias de las últimas tres décadas que según el Banco Mundial, y a pesar de la campaña alarmista de ciertos sectores, “tiene un impacto positivo sobre la distribución del ingreso y mejora fuertemente la equidad del sistema tributario”, el retorno de la gratuidad al sistema de educación chileno tras cuarenta años, el explosivo crecimiento de energías renovables en el sistema eléctrico de Chile desde 2014, la profundización de las reformas de su primer gobierno que protegían a la infancia y las mujeres, la triplicación de las plazas en educación preescolar en tan poco tiempo, las nuevas garantías de tratamiento gratuito para enfermedades de altísimo costo y aumento de cobertura AUGE a otras patologías no cubiertas antes, la caída significativa de la pobreza multidimensional, el aumento de 43% en los salarios de los profesores (37 horas semanales), le enorme infraestructura hospitalaria/cultural/portuaria/caminera que quedará terminado su mandato (varias que inaugurarán otros) y la adjudicación/licitación de obras por más del doble de lo que se hizo en el gobierno anterior (sin descontar el Puente Chacao). Todas reformas profundas, reformas estructurales que no se habían visto en décadas.
Forbes asevera que «usó su poder para firmar y enviar un proyecto de ley para legalizar el matrimonio gay y patrocinó un proyecto de ley en pro de los derechos reproductivos de las mujeres, aunque todavía hay una nube negra sobre su hijo, que estaría implicado en el uso tráfico de influencias. Además, ha introducido la primera planta de energía geotérmica en América del Sur y ha creado una reserva marina de 286.000 millas cuadradas alrededor de la Isla de Pascua para proteger especies endémicas».
En el listado, la Mandataria superó a Ivanka Trump, hija del presidente estadounidense Donald Trump que es considerada la mujer más poderosa de Estados Unidos, y a la alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Federica Mogherini.
La lista de las diez mujeres más poderosas en política la conforman este año:
- Angela Merkel, canciller de Alemania
- Theresa May, primera ministra del Reino Unido
- Tsa Ing-Wen, presidenta de Taiwán
- Michelle Bachelet, Presidenta de Chile
- Federica Mogherini, jefa de Política Exterior de la Unión Europea
- Ivanka Trump, asesora senior de la Casa Blanca
- Ruth Bader Ginsourg, Elena Kagan y Sonia Sotomayor, ministras de la Corte Suprema de EE.UU.
- Reina Isabel II de Inglaterra
- Sheikh Hasina Wajed, primera ministra de Bangladesh
- Beata Maria Szydlo, primera ministra de Polonia
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