CASTRO (La Opinión de Chiloé) — Durante este jueves se dio por finalizado parcialmente el caso de un violento robo registrado en octubre pasado al interior de un local comercial de Castro, y donde cinco delincuentes provenientes de Temuco y con amplio historial delictual perpetraron un robo con violencia con distinto grado de participación. A través de un procedimiento abreviado, a tres de ellos se les condenó a cinco años de cárcel, mientras que otras dos esperan que se desarrolle la acción penal por parte del Ministerio Público.
Según antecedentes de la acusación a los que accedió La Opinión de Chiloé, alrededor de las 14.20 horas del 19 de octubre de 2017, los imputados Pablo Hernán Quiñaleo Silva y César Gregorio Vera Pávez ingresaron con la intención de robar hasta al minimercado Arcoiris de calle Galvarino Riveros en Castro, el que era atendido por una mujer y otra acompañante, la que había sido previamente vigilada y seguida por las imputadas Natalia del Pilar Escobar Acevedo y Rocío Escarlet Nova Alarcón desde que efectuó un retiro de dinero desde el Banco Estado de la capital provincial hasta el sitio del suceso.
Ahí, y con el objeto de intimidarlas y facilitar la sustracción de dinero y especies, el imputado Quiñaleo Silva roció hacia las víctimas gas pimienta, instancia en la que el imputado Vera Pávez sustrae dos carteras con la suma de $3.390.000, en dinero en efectivo, diferentes tarjetas de crédito y de casas comerciales, un talonario de cheques, un par de aros de oro y 1 turbillón de oro, huyendo los imputados a bordo de un vehículo que era conducido por Cristhofer Alejandro Leiva Paillaman.
Posteriormente, fueron fiscalizados por personal de Carabineros de Retén de Panitao el 20 de octubre, encontrándose los cinco mencionados al interior del móvil que tenía la patente adulterada para ocultar que se trataba de un vehículo robado en Temuco.
De acuerdo al fallo que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, por estos delitos, Pablo Hernán Quiñaleo Silva y César Gregorio Vera Pávez fueron sentenciados en su calidad de autores del delito de robo con violencia a cumplir la pena de cinco años y un día de presidio mayor en su grado mínimo, mientras que Cristhofer Alejandro Leiva Paillamán fue condenado en su calidad de cómplice de tal robo y como autor de los delitos de receptación de vehículo motorizado y adulteración de placa patente a sufrir la pena de cinco años de presidio mayor en su grado mínimo.
Para el cumplimiento de la pena, se le abonarán a Quiñaleo Silva 139 días de abono, Vera Pavez 98 días de abono y Leiva Paillaman 101 días de abono tras estar en prisión preventiva. Los años de cárcel debieran ser cumplidos de manera efectiva.
Lo insólito de todo es que según fuentes consultadas por La Opinión de Chiloé, Vera Pávez había sido sentenciado en 2006 a una pena de 20 años de cárcel tras un violento robo a mano armada en una Veterinaria de Temuco, mientras que Quiñaleo Silva había sido sentenciado en 2012 a una pena de 7 años de presidio por un robo cometido en la misma ciudad (en 2009 había recibido 4 años tras ingresar a punta de pistola a robar a una casa de la localidad de Cajón, a 12 km al norte de Temuco). En las sentencias se puede leer que los magistrados consignaron que los delincuentes debían cumplir íntegra y efectivamente las penas, pero eso no impidió que estuvieran libres ¿cumplirán completamente el período de cárcel esta vez? Quizás.
Natalia del Pilar y Rocío Escarlet en tanto, esperan enfrentar a la justicia dentro de los próximos días, aunque luego que los tres sujetos reconocieran los hechos ante el magistrado, se esperaría la aplicación de una pena similar para las imputadas.
Comentarios