
CASTRO (La Opinión de Chiloé) — En manos del Ministerio Público de Castro se encuentra actualmente una investigación ya formalizada en contra de un profesor perteneciente a la escuela rural de Los Ángeles en isla Quehui por la presunta participación y responsabilidad que le cabría en su calidad de autor del delito de tratos degradantes a personas vulnerables hacia un niño huilliche de 11 años, ilícito previsto y sancionado en el artículo 403 ter en relación al artículo 403 bis del Código Penal, cometido en el mes de abril de 2018 al interior de dicho establecimiento educacional.
De acuerdo a antecedentes preliminares que tuvo a la vista La Opinión de Chiloé, fue una apoderada la que levantó la alerta luego que observara en su hijo un cambio actitudinal hacia la escuela, acusando que su pupilo fue sometido presuntamente a un trato degradante, menoscabando gravemente su dignidad, sin que se tomaran medidas correctivas a tiempo. Se habla de eventuales agresiones físicas, violentos actos intimidatorios (empujones de mesa, lanzar sus cosas al suelo, lanzarle su estuche al torso) y agresiones psicológicas con palabras inadecuadas, uso de apodos y mofas por su calidad de indígena, que habría derivado en sintomatología depresiva y un colapso a fin de año.
Ante ello, se habría denunciado los hechos a la escuela, donde según pudo corroborar La Opinión de Chiloé, trabaja la esposa del involucrado y otros dos familiares directos; además, la Corporación Municipal de Castro también fue informada. Lo insólito es que se habría decidido imponer una medida cautelar que era difícil de cumplir dado que el profesor debía mantenerse alejado del niño, pero como la escuela era pequeña, siempre se encontraba con él; además, tras la denuncia, el docente comenzó a regalar caramelos a los estudiantes regularmente, a quienes habría hecho partícipes de las burlas hacia el menor iniciándose agresiones por parte de ellos.
El profesor fue formalizado el 21 de febrero pasado fijándose un plazo de investigación de 30 días, el que sería ampliado tras una serie de diligencias pendientes e informes de peritos que aún se están realizando. De prosperar una acusación, el profesor podría arriesgar hasta 540 días de presidio de aplicarse la nueva Ley n.°21013, aquella promulgada durante el gobierno de Michelle Bachelet que tipificó un nuevo tipo de maltrato infantil, esto es, el de tratos denigrantes a personas vulnerables. La Fiscalía aún analiza si aplicará el artículo 14 del Código Penal para quienes habrían actuado como cómplices y/o encubridores, de existir.
Luego de la formalización, el tribunal decretó la prohibición del imputado de tener cualquier tipo de contacto con el menor, ordenándose a la Corporación de Educación Municipal de Castro tomar las providencias necesarias atendido que el imputado sigue como profesor en esa escuela.
NOTA DE LA REDACCIÓN: Dado lo delicado de la denuncia La Opinión de Chiloé no develará por ahora los nombres de los presuntos implicados.
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