Véase también:
Chonchi: trasladan a bebé grave a Puerto Montt; PDI sospecha atroz golpiza.
CHONCHI (La Opinión de Chiloé) — En recuperación, aunque aún siendo evaluada por los equipos médicos que la atendieron en Puerto Montt para determinar si existe daño neurológico, se encuentra una pequeña lactante oriunda de Chonchi que a fines de octubre pasado, y con apenas un mes y nueve días de vida, fue trasladada al Hospital de la capital regional tras presentar varias lesiones craneanas, y cuyo origen aún se está investigando.
De acuerdo a información reservada a la que accedió La Opinión de Chiloé, las indagatorias continúan para determinar la dinámica de todo ya que la principal testigo, su madre, hasta el día de hoy asegura no saber lo que pasó y cómo su hija terminó en estado grave. Es más, mientras se encontraba en la Unidad de Paciente Crítico (UPC) del nosocomio puertomontino, se pudo detectar que la bebé tenía otras fracturas anteriores no tratadas, por lo que probablemente vivió con un agónico dolor durante un tiempo indeterminado sin que nadie la auxiliara.
Así quedó asentado hace algunos días cuando se realizó una audiencia preparatoria de medida de protección ante el Juzgado de Familia de Castro, instancia donde se reveló que luego de varios exámenes médicos, se constató la presencia de fracturas costales antiguas, vale decir, que se habrían provocado antes de la fractura craneal por la que era tratada.
A este respecto, esas lesiones no fueron pesquisadas al ser atendida en el Centro de Salud Familiar de Chonchi antes del incidente mayor. Los antecedentes que se manejan hasta ahora es que al menos dos médicos de ese recinto ya habían visto a la bebé tras el arribo de la madre refiriendo un supuesto comportamiento «extraño», dándola de alta sin percatarse de los signos de alerta, por lo que este actuar negligente podría constituir un acto criminal que el Ministerio Público sigue investigando.
Lo cierto es que las condiciones neurológicas de la bebé por ahora son inciertas dada la tardanza con la que fue trasladada a un centro asistencial y la gravedad con la que llegó, por lo que sigue en observación para exámenes más complejos.
Cabe recordar que tal y como consignó La Opinión de Chiloé, la tarde del sábado 24 de octubre pasado, la madre llegó hasta el Servicio de Urgencia del Cesfam de Chonchi con la pequeña en brazos quien presentaba un severo compromiso de consciencia.
Ahí explicó que la bebé no reaccionaba hace varias horas, que no comía ni despertaba al menos desde la madrugada, provocando impacto en quienes las examinaron ya que estaba con un ojo inflamado y morado, como si le hubieran dado un combo, mientras que su cabeza estaba extremadamente inflamada.
La menor no reaccionaba como una bebé normal. Y la madre no supo explicar el estado de su hija, a pesar que ella misma ha reconocido insistentemente que se encargaba del cuidado personal de la niña casi de manera exclusiva, defendiendo implícitamente a su conviviente, un delincuente que hace poco tiempo salió de la sección de alta peligrosidad del Centro Penitenciario de Alto Bonito en Puerto Montt, y quien estuvo inubicable días posteriores.
Así las cosas, la niña fue trasladada de urgencia hacia el Hospital Dr. Augusto Riffart de Castro, lugar donde un escáner encontró lo que parecían ser múltiples fracturas craneanas de carácter grave, por lo que se decidió de inmediato su derivación hacia Puerto Montt para que un especialista en neurocirugía la viera, quedando en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del nosocomio en comento.
Fuentes confirmaron a La Opinión de Chiloé que la pediatra que la atendió al comienzo vio que algo extraño ocurría, descartando la potencial existencia de alguna caída al verificar que existían otras lesiones que los exámenes ya constataron.
El caso sigue en dos frentes judiciales, tanto en el Juzgado de Familia como en el Juzgado de Garantía, ambos de Castro, instruyéndose una serie de medidas que buscarían, por un lado, proteger la integridad física de la menor, y por otro, determinar responsabilidades de tipo penal.
Las dudas son patentes respecto al rol de la madre debido a la tardanza en llevar a la niña al Cesfam de Chonchi ese sábado, a pesar que según su propio relato, la pequeña ya parecía tener compromiso de consciencia varias horas antes.
Es más, la versión del porqué no hizo algo rápidamente cuando vio que su hija no comía o no reaccionaba normalmente tendría algunas inconsistencias. Inicialmente negó saber lo que le pasó, aunque posteriormente habría aseverado que quizás le dio un codazo mientras dormía sin darse cuenta. Sobre las fracturas costales, no ha dado explicación.
El Ministerio Público ha instruido distintas diligencias, incluyendo la revisión de los informes médicos de la menor en el Cesfam de Chonchi, en el Hospital de Castro y en el Hospital de Puerto Montt. Tanto la Brigada de Homicidios de la capital regional como el OS9 de Carabineros han estado a cargo de determinar las circunstancias que habrían detrás de estas lesiones, pero las dudas persisten.
El caso se encuentra caratulado preliminarmente como lesiones graves en carácter de desformalizado, mientras la bebé continuaría internada en Puerto Montt a la espera de exámenes que determinen si quedó con secuelas.
Fuentes de tribunales confirmaron a La Opinión de Chiloé que por ahora existe una medida cautelar en contra de la madre que le prohíbe acercarse a la bebé, mientras que sobre su conviviente, ello se consideró innecesario atendido que no hay vínculo de parentesco por lo que no podría acceder a ella gracias a los protocolos del hospital.
Preliminarmente, y una vez dada de alta, la menor podría ser trasladada a un recinto dependiente del Sename, el que probablemente podría ser el Hogar San Arnoldo de Puerto Varas a cargo de la Fundación Verbo Divino.
Comentarios