ANCUD (La Opinión de Chiloé) — Un conjunto de diligencias investigativas instruyó el Ministerio Público de Ancud para determinar las circunstancias detrás de un violento accidente de tránsito ocurrido durante la noche de este domingo al oeste del radio urbano de esa ciudad, y que dejó a tres personas con lesiones de carácter grave, dos de ellas niñitas.
De acuerdo a información preliminar recopilada por La Opinión de Chiloé, las alarmas de emergencia se activaron alrededor de las 21.30 horas cuando se informó que dos vehículos menores colisionaron frontalmente, y a alta energía, en el sector Pilluco. Se refirió que un automóvil manejado por una joven madre —que trasladaba a dos niñitas en su interior— fue impactado por otro móvil que iba con un solo ocupante.
La dinámica de lo que ocurrió se está indagando, aunque lo que se sabe hasta ahora es que este siniestro vial fue pasado el cruce Cabeza de Vaca, yendo hacia la Península de Lacuy, a la altura del kilómetro 9,5 de la Ruta W-20, resultando tanto la mujer como las dos menores de edad con heridas de carácter grave, mientras que el chofer del otro automóvil habría quedado con lesiones de mediana gravedad (preliminar).
Fuentes consultadas por La Opinión de Chiloé indicaron que la identidad de la afectada mayor de edad era C.P.V.B. (29 años), y que las niñas de 10 y 12 años de edad correspondían a su pequeña hijita y a una amiguita de ella.
Una de las hipótesis que se maneja por el momento es que el conductor que las colisionó no solamente se trasladaba por la vía en zigzag, a una velocidad imprudente y de manera temeraria, sino que además, estaba bajo los efectos del consumo de estupefacientes y alcohol.
A este respecto, personal de emergencia constató in situ que el delincuente presentaba evidente incoherencia al hablar, un fuerte hálito alcohólico, inestabilidad al caminar y el rostro congestionado, todo consistente con una persona que estaba imposibilitada para conducir por estar en manifiesto estado de ebriedad.
Junto con lo anterior, se sumaría indicadores de consumo de drogas ya que presentaba cierto nivel de deterioro del criterio o juicio, dificultad para concentrarse y problemas de coordinación evidentes. El aludido sería un sujeto de alrededor de 29 años de edad.
Voluntarios del Cuerpo de Bomberos de Ancud fueron despachados hacia el lugar del siniestro para apoyar en las labores de rescate, sumándose personal de la salud quienes procedieron a estabilizar y trasladar a las tres ocupantes referidas hacia el Hospital San Carlos de Ancud con un diagnóstico poco alentador.
También se hizo lo propio con el chofer ebrio y drogado, que al cierre de esta nota se encontraba a la espera de ser dado de alta para quedar a disposición de la justicia.
En dicho marco, durante esta madrugada se habría procedido a trasladar a la joven madre y a las dos niñitas hacia el Hospital de Puerto Montt Dr. Eduardo Schütz Schroeder, estando todas con diagnóstico reservado al cierre de esta nota.
El mayor Marcelo Bahamonde, comisario de la Primera Comisaría de Carabineros de Ancud, confirmó la información indicando que cuando los funcionarios de su dependencia llegaron al lugar del accidente «se encuentran con la colisión de dos vehículos pequeños, uno Kia y un Chevrolet Corsa, y con cuatro personas con lesiones graves en ese momento».
Dijo que «se pudo establecer que en uno de los vehículos circulaba un hombre de 29 años que lo hacía solo, y en evidente estado de ebriedad, por lo cual se procedió también a su detención. El otro móvil era conducido por una señorita de 29 años, que se hacía acompañar de dos niñitas, una de 10 y otra de 12 años».
Secundó los detalles ya mencionados anteriormente al afirmar que «todas resultaron con lesiones de gravedad, lo que significó que tuvieran que ser durante la madrugada, trasladadas hasta el Hospital Base de Puerto Montt».
Aseveró que en el sitio del suceso «trabajó ahí el equipo SIAT nuestro para determinar las causas», agregando que además de la ebriedad manifiesta, «se procedió a someter al conductor ebrio al examen de narcotest, donde arrojó también positivo para la presencia de marihuana, se informó esto a la fiscalía», acotó.
El Ministerio Público de Ancud abrió una causa penal para dilucidar lo que pasó, caratulándose inicialmente el caso como un eventual delito de conducción de vehículo motorizado en estado de ebriedad y bajo la influencia de sustancias estupefacientes o psicotrópicas con resultado de daños, lesiones graves y lesiones graves gravísimas, descrito y sancionado en el artículo 196 con relación al artículo 110, ambos de la Ley de Tránsito.
Conocidos los antecedentes, el fiscal de turno instruyó que se dejara al imputado bajo apercibimiento del artículo 26 del Código Procesal Penal a la espera de ser dado de alta, por lo que su caso aún no ha sido visto por el Juzgado de Garantía de Ancud.
En el entretanto, se solicitó la concurrencia de funcionarios de la Sección de Investigación de Accidentes en el Tránsito (SIAT) de la Prefectura Chiloé para peritar el lugar.
En este sentido, los peritos realizaron tanto un levantamiento planimétrico como fotográfico, así como pericias mecánicas del accidente para intentar reconstruir la dinámica de este accidente, aunque a priori la teoría del caso más plausible imputa responsabilidad al chofer ebrio y drogado.
Todo lo anterior se complementará con las diligencias encargadas al SML para confirmar, principalmente, el nivel de alcohol con el que manejaba el sujeto que sería el principal responsable.
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